El termómetro de la 14ª jornada

Madrid, 24 nov (EFE).- Termómetro de la decimocuarta jornada de LaLiga Santander:,-- SUBEN:,- Luka Modric: recuperó la imagen que le dio un Balón de Oro, el mando del juego del Real Madrid para impulsar la remontada ante la Real Sociedad. En un momento de su carrera en el que comienza a dejar de ser insustituible, con más suplencias de las que desea, se rebeló en el terreno de juego con dos asistencias y un gol. La competencia con Toni Kroos y Fede Valverde crece. Zinedine Zidane sale ganando.,-

Madrid, 24 nov .- Termómetro de la decimocuarta jornada de LaLiga Santander:

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- Luka Modric: recuperó la imagen que le dio un Balón de Oro, el mando del juego del Real Madrid para impulsar la remontada ante la Real Sociedad. En un momento de su carrera en el que comienza a dejar de ser insustituible, con más suplencias de las que desea, se rebeló en el terreno de juego con dos asistencias y un gol. La competencia con Toni Kroos y Fede Valverde crece. Zinedine Zidane sale ganando.

- Iago Aspas: el Celta de Vigo necesitaba para levantarse a su líder y al fin apareció. Firmó en el estadio de la Cerámica los mismos tantos que en toda la temporada, un doblete repleto de calidad en la definición y decisivo ante el Villarreal para dar a su equipo el primer triunfo a domicilio liguero. Su mala racha le alejó de la selección española pero aún hay tiempo para ganarse con goles su sitio en la próxima Eurocopa con el regreso de Luis Enrique.

- Joselu Mato: retomó el testigo de Lucas Pérez, que finalizó su racha goleadora de récord, para firmar un doblete en los 17 minutos que estuvo sobre el césped en Ipurua. Entró en un partido igualado y lo desequilibró a base de pegada. Cortó la racha de cinco salidas con derrota consecutivas de un Alavés que no vencía lejos de Mendizorroza desde marzo.

- Kenan Kodro: su gol más esperado no tuvo la celebración que merecía. Sin apenas oportunidades en el Athletic Club, firmó el tanto del triunfo ante Osasuna, el equipo que le dio "la vida" como definió. Alegría interna y máximo respeto a la que fue su casa. Encontró un balón muerto en el área, controló en el aire de diestra y cruzó su disparo a la red de zurda. Firmó el primer triunfo de visitante de su equipo.

-- BAJAN:

- Gareth Bale: dejó buen nivel futbolístico en su regreso en los minutos de los que dispuso pero fue el centro de la polémica con una bronca sin precedente de la afición del Real Madrid a uno de sus jugadores en el estadio Santiago Bernabéu. Por momentos la atención de todos se centró en el galés, que espero a entrar en el campo varios minutos aguantando silbidos que le acompañaron cada vez que entró en juego. Ni un gesto a la grada, consciente de que ha acabado con la paciencia del aficionado al que ya tiene difícil volver a ganarse aunque vuelva a rendir en lo que queda de temporada.

- El Sadar: fin a la mejor racha de Osasuna sin perder en su estadio. El Athletic Club, el mismo equipo que ya cerró la mejor de su historia en Primera, repitió 60 años después. El Sadar aguantó el paso de los grandes y fue derribado por los goles de Iñaki Williams y Kodro, para dejar en 31 partidos consecutivos sin perder que sirvieron para el regreso a la elite del fútbol español y mantenerse de momento sin agobios, instalado en mitad de la clasificación de LaLiga Santander.

- Defensa del Leganés: ganaba al líder en un partido que habría sido clave para su reacción, tuvo por momentos al Barcelona ante las cuerdas, provocando una mala imagen en el rival hasta que cometió errores de concentración defensiva con los que es imposible sumar en la élite. No selló bien los marcajes en dos acciones a balón parado, primero ante Luis Suárez que remató a placer a bocajarro sin la oposición de ningún jugador y finalmente en un saque de esquina del que Vidal sacó provecho sin oposición. Los rivales suman y el Leganés cada jornada se hunde un poco más en la clasificación.

- Jasper Cillesen: definitivamente el Benito Villamarín no es un estadio que le deje buen recuerdo al portero holandés. Allí se despidió del Barcelona, jugando y perdiendo la final de la Copa del Rey. En su regreso encajó dos goles, el último que provocó la derrota del Valencia en el minuto 93, con una falta lateral de Sergio Canales ante la que pudo hacer mucho más.