Einar Galilea, la presión y la exigencia del Málaga: "Sabemos donde nos metemos"
Einar Galilea desprende liderazgo. A sus 29 años es uno de los veteranos de esta plantilla malaguista, que todavía tiene que crecer con más fichajes. En el NK Istra de Croacia fue capitán. Ahora, en el Málaga, aspira a serlo. Al menos, de manera simbólica sin necesidad de brazalete. Firmó por las dos próximas temporadas con opción a una más y ha sido presentado este miércoles en La Rosaleda junto a Luca Sangalli, los dos últimos fichajes en llegar a puerto malacitano.
“Al estar fuera durante los últimos cuatro años yo estaba en otro mercado. Tenía opciones de seguir en el extranjero, pero en cuanto pasó el tren del Málaga mi fichaje se cerró muy pronto”, reconoció el central vasco, que se define como un jugador con personalidad. Con ese ingrediente y su experiencia en el fútbol europeo, Einar apunta a ser indiscutible como ejemplo de voz cantante dentro y fuera del verde.
Puede jugar de central o de pivote defensivo y esa condición de peso pesado en el grupo aún no la ha notado. "No he notado ese peso en el vestuario. Vengo a un equipo nuevo con gente que lleva muchos años mamando de la casa. Soy una persona con personalidad. Pero vengo para aprender de los compañeros y empaparme de lo que hay".
Presión, química y más claves
Pretemporada: “La acogida ha sido muy buena por los compañeros y el club. Nos han hecho sentir como nuestra segunda casa, que es lo que va a ser. Venimos a un barco nuevo y tenemos que aprender mucho más”.
"En estas semanas estamos haciendo hincapié en la intensidad, lo que representamos cuando vestimos este escudo, la responsabilidad y toda la gente detrás. En la fase de adaptación que estamos teniendo estamos trabajando muy bien. Iremos creciendo como equipo".
"Al final es coger sensaciones. Tenemos muchos partidos amistosos por delante. Las sensaciones son buenas. Es importante que no haya lesiones e ir cogiendo química con los compañeros".
Posición: "He alternado centro de la defensa y pivote defensivo. Los dos últimos años di un paso atrás a hacerme central, pero a lo largo de mi carrera he ido alternando las dos. Si el mister lo requiere estaré dispuesto a jugar donde haga falta".
Claves de la temporada: "Todo el mundo nos recibió con los brazos abiertos. Los dos últimos años han sido de una dinámica muy negativa y tenemos que intentar un cambio de esa dinámica. Y lograr ser una familia. Ya veremos dónde podemos llegar".
¿Presión?: “Sabemos donde nos metemos, pero eso es bonito. Jugar delante de 30.000 personas, las ganas de crecer, la autoexigencia… al final, lo que he vivido en mi carrera fue muy diferente y en Vitoria era otro tipo de ambiente y al ser yo de allí, también cambio la percepción que tienen de ti. Es un reto bonito que tendrá momentos buenos y momentos difíciles y donde nos tendremos que apoyarnos los unos a los otros".
Objetivo: "Exigirnos en el día a día. Convertir las dinámicas negativas en positivas. El grupo de Primera RFEF es muy difícil y competido. Todo el mundo querrá hacer el mejor partido aquí. Quieren presentarse de la mejor manera posible y nuestra labor será la contraria. Intentar ponérselo lo más difícil posible".
