Causas y consecuencias de la decisión del Ayuntamiento sobre el Nou Mestalla: ¿Afectará al Mundial 2030?
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La respuesta del Valencia CF a la negativa para negociar el convenio del Nou Mestalla
El Ayuntamiento ha dado un paso crucial en la historia del Nou Mestalla. Se ha cerrado en banda para conceder el convenio, parado desde enero, y ha anunciado que "Sólo en el momento en que el Valencia C.F reanude efectivamente las obras se entablarán negociaciones para avanzar en un convenio que partirá del borrador realizado por el anterior gobierno municipal, aunque con incorporaciones que garanticen que el club cumpla con la ciudad". La decisión ha cogido en fuera de juego a todos, incluso al Valencia CF, que ve positivo el cambio de guión
Sin duda, el movimiento sorprende cuando el concejal responsable del área, José Marí Olano, se ha reunido con los distintos grupos políticos, con Juan Martín Queralt y la Agrupación de Peñas, como desveló este diario, la Asociación del Pequeño Accionista de Valencia CF y Libertad VCF, y espera un informe jurídico para saber si puede negociar con el Valencia CF. Olano y el Ayuntamiento encabezado por Maria José Catalá no ha querido esperarse al mismo y ya ha dado un paso definitivo: concederá las licencias pero no negociará hasta que no vea las máquinas en el Nou Mestalla.
La decisión implica una serie de causas y consecuencias que en ElDesmarque destripamos con detalle y analizamos si pueden afectar no a la candidatura para el Mundial 2030.
El Valencia CF tendrá licencias, podrá construir si Lim quiere: presión
El Valencia pidió el 26 de julio de 2022 las licencias para construir un estadio de 66.000 personas, ampliables hasta las 70.000 cuando haga falta, Es decir, el Ayuntamiento lleva 15 meses para concederle el permiso de obras, entre otras cosas porque hubo un cambio de Gobierno y se estaba peleando el Convenio.
Esas licencias, según Marí Olano, concejal responsable del área, reflejan un proyecto que "cumple con las líneas esenciales de un estadio de primera, entendiendo por un estadio de primera aquel capaz de cumplir los requisitos de la UEFA para albergar una final de la Champions. Y creo que no hay estadios mejores".
La pelota está en el tejado del Valencia CF, pero a fin de cuentas es una de las cosas que pidió Germán Cabrera, secretario del consejo y abogado de Lim, en la charla que tuvo con Olano (la otra era flexibilizar los avales y el acceso a las ventajas urbanísticas para poder ir financiando la obra, cosa que no va a ser así al menos de momento)
Tendrá que contactar con las constructoras
Fomento de Construcciones y Contratas y Bertolín son las empresas que empezaron a construir el campo mediante una UTE, el Valencia debe ahora reactivar la relación para que empiecen de nuevo siempre y cuando las licencias estén concedidas, cuestión que parece que ahora sí verá luz verde.
No habrá cambio de promotor, ni ejecución subsidiaria
La decisión del Ayuntamiento de conceder las licencias (si el Valencia cumple con la documentación) descartan que haya cambio de promotor y ejecución subsidiaria de las obras como han pedido algunas voces de la sociedad valenciana, la última VOX o Zorío. Además, al no negociar el convenio deja fuera del debate las críticas de la oposición que pedía que no se le den ventajas extras al Valencia CF, Meriton o/y Peter Lim.
Adiós al supuesto conflicto de intereses de Olano
Políticamente la decisión es clave. Si no hay negociación del convenio, se acaban los debates sobre el posible conflicto de intereses de José Marí Olano, que es concejal y trabaja con la consultora KPMG, como insinuó VOX y por los que han pedido explicaciones Compromís, que ha citado un pleno, y el PSPV este mismo martes, pidiendo su cese
Construirá si quiere, pero nadie le garantiza al Valencia las ventajas del convenio que pide aclaraciones
El principal problema para el Valencia CF es que tendrá que empezar a construir sin que nadie le garantice después las ventajas contempladas en el convenio, ni tan siquiera las certezas respecto a cosas como si se instala pista de atletismo quién la paga. Deja de existir el marco jurídico y urbanístico que sí contemplaba la ATE y que regía cuestiones como los usos de la pista de atletismo, por ejemplo. De ahí que el Valencia CF aunque vea positivo empezar a construir, advierte que "ahora hay aún muchas cosas que concretar para poder hacerlo",
En ese sentido al menos están aprobadas las fichas urbanísticas Esto es, el Valencia podrá disponer del terciario del Nou Mestalla cuando el club pague el polideportivo, o podrá disponer de la edificabilidad del Mestalla a medida que se pidan las licencias de obras del Nou Mestalla. Y la inscripción en el registro del PAI (convenio) quedará condicionada a que las obras estén acabadas.
El club debe pagar el polideportivo para poder financiar el campo
Tal y como ha venido informando ElDesmarque, el Valencia tiene claro que para financiar el campo debe utilizar los 80 millones de CVC, los 35 de la zona comercial anexo al estadio, la venta de otras propiedades (oficinas) y un doble préstamo puente de Caixabank y Rights & Media Funding Limited como explicó en junio de 2022 la directora financiera Inma Ibáñez.
Ahora ya sabe que sólo cuenta con los millones de CVC y los préstamos pues el Ayuntamiento no dará licencia alguna respecto de las parcelas de aprovechamiento lucrativo privado del Nuevo Estadio (Zona comercial en la que está interesada Atitlán) sin que, previamente, se haya ingresado en la tesorería la cantidad correspondiente a la construcción del polideportivo municipal de Benicalap, con IVA incluido (alrededor de 10 ó 12 millones).
Más exigencias al Valencia CF: avales bancarios y detalles financieros: ideal para garantizar ser sede del Mundial
Entre las incorporaciones que no se preveían en el borrador del convenio realizado por el anterior equipo de gobierno, se le exigirá al Valencia que una programación temporal de las obras con multas (avaladas bancariamente en caso de incumplimiento) y, lo que es más importante así como detalle de las fuentes de financiación de las obras del Nuevo Estadio. Con esta medida el Ayuntamiento pretende dos cosas: garantizarse que cuando empiecen las obras hay dinero para acabarlo y garantizar a la RFEF que el estadio del Nou Mestalla estará listo para ser una de las sedes del Mundial 2030.
El Valencia CF y/o Peter Lim sólo podrán sacar tajada al final
Con esta decisión, sólo hasta que esté construido el campo el Valencia CF podrá acceder a la jugosa parcela donde está Mestalla. En esa parcela yacen muchos de los recelos de la oposición y dónde podría obtenerse pingües beneficios. Ahora, tras el comunicado municipal sólo se aprobará la reparcelación de los terrenos de Mestalla fincas de resultado sin que, meramente el Nuevo Estadio este totalmente construido y en funcionamiento o se haya demolido Mestalla o garantizado su demolición mediante aval bancario. Es decir, construye y te dejaré acceder a los 90.000 metros cuadrados de la parcela del campo con los que hacer negocio pues ahí se pueden construir pìsos y zona comercial.
¿Afectará a la sede del Mundial 2030? Presión para la ciudad
En teoría no. La sede cumple todo y nada. Reúne las características que pide la FIFA (aeropuerto, hoteles etc..) pero le falta lo más importante: el estadio. Por eso, si el Ayuntamiento coincide las licencias en tiempo, el Valencia podrá construir el campo y tenerlo para la temporada 2026-27 como pretende, pero no hay que olvidar que los más interesados en albergar una sede del Mundial por el prestigio y el beneficio que implica son las instituciones: Generalitat y, sobre todo, el Ayuntamiento. Nadie se imagina un Mundial sin Valencia. Está claro que no todo se puede condicionar a la cita, como dijo la alcaldesa Catalá, pero desde la Federación :Española tienen claro que un Mundial sin Valencia es un Mundial descafeinado. Al club le interesa, de hecho le supondrían unos ingresos extras interesantes, pero no es vital para el futuro de su campo. Al igual que el Valencia tiene desde este miércoles la presión constructiva, la presión de ser sede se reparte.
En ese sentido, Salva Gomar, presidente de la Federación Valenciana, la cuarta pata de la candidatura, lo tiene clarísimo:"Seríamos torpes si una sede como Valencia no estuviera"
"Yo desde el principio he sido optimista y sigo siendo optimista y creo que Valencia tiene que ser sede. Para mí, eso significa que el estadio estará en el año 2030", dijo el presidente.