El gran perjudicado del buen estado de Griezmann y Morata en el Atlético
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Correa solo ha sido titular una vez en lo que va de temporada
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Suma tres goles y una asistencia
El Atlético de Madrid está en un momento impecable. Después de igualar la mejor racha de triunfos locales en Liga de su historia, Diego Pablo Simeone tiene claro que gran parte de la culpa de la mejor versión goleadora la tienen sus dos delanteros de oro Antoine Griezmann y Álvaro Morata.
Sin embargo, detrás de lo protagonismo del francés y el español está la dura parte que le está tocando vivir a Ángel Correa. Un delantero que empezó la temporada siendo un revulsivo y que actualmente es incapaz de darle la vuelta.
El argentino, acostumbrado a estar lejos de los focos, comenzó la pretemporada siendo el cuarto delantero por detrás de Memphis Depay pero ni la lesión de neerlandés, que sigue arrastrando sin fecha de vuelta, ha hecho que no haya tenido poco más que destellos.
Sin protagonismo en el Atlético
En la pasada jornada ante el Alavés empezó desde el banquillo y sumó su sexta suplencia en los siete partidos en los que ha estado disponible. La única vez que jugó como titular en Liga fue ante el Cádiz debido a la sanción de Morata por su expulsión la jornada anterior contra Osasuna.
A pesar de sumar tres goles y una asistencia en lo que va de temporada, el momento que más ha dado que hablar de él fue su polémica recuperación después de sufrir una dura entrada de Jude Bellingham en el derbi madrileño. Forzó para estar disponible y anotó un doblete ante los rojillos, demostrando que estaba preparado para asumir un papel más importante en el equipo colchonero. Pese a ello, descansó la jornada posterior y apenas ha jugado la mitad de la segundas partes.
En Champions suma solo 43 minutos en tres partidos y en total ha disputado 264, una cifra muy inferior a la de su competencia (1.089, Griezmann; 896, Morata).
Al nivel actual de ambos, la posibilidad de que el argentino pueda subir al once inicial se postula casi imposible salvo una lesión. Correa nunca ha podido quitarse el cartel de rotación y ahora tiene más difícil que nunca pedirle una oportunidad a Simeone.