El pivote de urgencia en el Real Madrid es cosa de dos

Las lesiones están castigando mucho al Real Madrid. Aunque perder a Vinicius durante dos meses y medio es la baja más dolorosa para los de Carlo Ancelotti, los agujeros que existen en el mediocampo a causa de las bajas suponen un giro de tuerca obligatoria para el conjunto merengue.

Llegaron los primeros problemas con la caída de Aurelién Tchouaméni en El Clásico, donde sufrió una fractura del segundo metatarsiano del pie izquierdo: entre seis y ocho semanas de baja. Y ahora, en este parón de selecciones, Eduardo Camavinga también dio la mala noticia al romperse el ligamento lateral externo de su rodilla derecha: entre ocho y diez semanas de baja.

Un largo tiempo que obliga a Ancelotti a tener que reinventar la medular del equipo con dos hombres que tienen experiencia jugando como pivote: Toni Kroos y David Alaba.

Toni Kroos, hombre de confianza

La primera alternativa sería colocar al alemán en el puesto de "5" por detrás de los mediocampistas, una labor que que ya ha hecho cuando el Real Madrid lo ha necesitado como el pasado invierno, donde cumplió a las mil maravillas y jugó hasta cinco partidos de ancla.

Bien colocado para sacar el balón jugado entre los centrales y con una precisión de escuadra y cartabón al que es difícil quitarle el balón. Aunque su repliegue y físico no es comparable con el de los dos jóvenes franceses, Kroos está manteniendo un gran nivel esta temporada hasta tal punto de ganarse la titularidad en partidos importantes. Lo que se preveía como un jugador de reserva junto con Luka Modric se ha convertido en la brújula del mediocampo.

Por ello y su experiencia, Ancelotti lo valora como un gran refuerzo hasta que llegue Tchoauméni. Aún así, el germano no tiene gasolina para aguantar partidos completos durante tanto tiempo y ahí es donde entra en juego Alaba, uno de sus mejores amigos en el vestuario.

Alaba, con experiencia para jugar de pivote

El futbolista austriaco se caracteriza por haber jugado en diferentes posiciones dentro del campo. En su etapa en el Bayern de Múnich, entrenadores con reputación como Jupp Heynckes y Pep Guardiola lo colocaron tanto en el pivote como en el mediocentro, sumando 27 y 51 partidos respectivamente.

Sin embargo, con el paso de los años ha retrasado su posición a la defensa, donde Ancelotti siempre lo ha puesto de central (82 encuentros) y de lateral izquierdo (15 encuentros). Una opción a tener en cuenta para dar descanso a Kroos en una zona que aún desconoce con la camiseta del Real Madrid.

Además, todo el cuerpo técnico coincide en que reúne cualidades para serlo (buena conducción de balón, capacidad para romper líneas, jugar en largo...). Una alternativa que no disgusta y que deja un escenario en el que el pivote parece ser cosas de dos.