Hernández Hernández justifica su decisión final en el penalti del Celta - Sevilla: "No lo era"

El aficionado no está acostumbrado a escuchar a un árbitro. Y eso que lo demanda desde hace varias temporadas. Ocurre en contadas ocasiones, y a veces, sirve para que los seguidores conozcan los motivos de su decisión en una jugada concreta. Con la vuelta de LALIGA EA Sports a la vuelta de la esquina, Hernández Hernández ha hablado de la polémica acción entre Jesús Navas y Douvikas.

El trencilla compareció el pasado miércoles ante los micrófonos de El Partidazo de COPE. Como no podía ser de otra forma, Hernández Hernández fue cuestionado por la polémica arbitral que generó aquel encuentro en Balaídos.

Para Hernández Hernández no es penalti

El colegiado canario, pese a que en el campo decretó pena máxima, cambió su decisión tras recibir la llamada desde la Sala VOR. En la citada entrevista, Hernández Hernández afirmó que la acción no era merecedora de penalti: "Es una jugada compleja. Al final el VAR está para solucionar y yo creo que al final se tomó la decisión más correcta y eso es lo importante. Se dejó de pitar un penalti que, una vez analizado, no es penalti. Por lo tanto, si intervenimos e intervenimos bien, es que no debería haber intervenido porque no es jugada de VAR. Pero coño, hemos intervenido bien, hemos solucionado un problema, hemos quitado un penalti que no era penalti. Pues ya está".

Aquella noche había mucho en juego en Balaídos. El árbitro habla de la importancia que para él tuvo ese Celta - Sevilla: "Lo que pasa que es el partido que es y el equipo que ahora mismo está pasando por un momento en cuanto a decisiones arbitrales en el que ellos no están cómodos. Pero este penalti se pita en cualquiera de los otros nueve partidos de esa jornada en España, y se cancela como lo hice yo a posteriori, no hubiera dado ruido ninguno. Estoy absolutamente convencido. El contexto es el que es, nosotros entendemos".

Por último, Hernández Hernández reconoce que habló con un futbolista celeste en su vestuario: "Después del partido hablé con un jugador del Celta en mi vestuario y la predisposición fue super correcta. Le expliqué los argumentos, él me explicó el sentimiento de su equipo y le dije que los entendíamos. Además le dije que venía a Vigo como si pitara un Clásico. Iba con la sensación de que teníamos un partido importante porque sabemos por lo que están pasando, no somos ajenos a nada. Al final lo intentamos hacer lo mejor posible y yo creo que actuamos correctamente: se anuló un penalti que no era penalti".