Viaje en el tiempo a través de la historia de las ruedas Mercedes-Benz

Las ruedas definen el carácter de un vehículo. El diseño de llantas Mercedes-Benz expresan sofisticación y cultura e influyen en el arte. Nos damos una “vuelta” por la historia de la marca de la estrella.

Durante siglos, las ruedas siempre han caracterizado nuestro paisaje urbano, desde los carros hasta los automóviles. Desde clásicos atemporales e iconos de estilo como la "rueda barroca" del legendario Mercedes‑Benz C 111 de 1969 hasta las modernas ruedas aerodinámicas con apariencia escultórica, a menudo son una expresión de su espíritu de época e influyen en el arte, la cultura y el diseño.

Siguiendo la tradición, muchos diseños siguen los temas generales de Mercedes. Un ejemplo es el diseño plano, que se puede encontrar en diferentes versiones en los modelos Mercedes‑Benz, Mercedes‑AMG y Mercedes‑Maybach. Las llantas de radios cruzados en diferentes configuraciones forman parte de la gama tanto como los modelos de radios múltiples de filigrana. Los radios simples, dobles o triples enriquecen la gama. Diferentes colores y superficies pulidas añaden otros acentos. Las superficies bruñidas de las llantas forjadas de la serie Mercedes‑Maybach representan la gama más alta.

El primer Mercedes

El inventor del automóvil también se adelantó a su tiempo en lo que se refiere a la elección de ruedas. Carl Benz construyó su automóvil patentado en 1886 sobre ruedas con radios de alambre de metal fino. Estas ruedas dominaron durante muchas décadas. Constaba de varias piezas y combinaba radios de madera firmemente atornillados con una llanta de acero. El primer modelo de Mercedes corrió de victoria en victoria en la semana de carreras de 1901 en Niza sobre ruedas con doce radios de madera cada una. Este Mercedes de 35 CV no solo pasó a la historia como un sensacional automóvil deportivo, sino que también es reconocido como el primer automóvil moderno del mundo.

Las ruedas de alambre de filigrana: de 1910 a 1930

Las ruedas de radios de alambre, ligeras pero robustas, se hicieron muy populares en los coches deportivos. Eran un 50% más ligeras que sus homólogas de madera. Para las carreras y los eventos de récords, a menudo se las equipaba con cubiertas de chapa de acero o aluminio. Estas "ruedas de disco" generaban menos turbulencias en el aire y, por lo tanto, aportaban considerables ventajas aerodinámicas. Un ejemplo destacado es el "Blitzen"-Benz de 200 CV. En 1911, fue el vehículo más rápido jamás construido, con una velocidad máxima de 228 km/h.  Se convirtió en un símbolo mundial de los récords y en una leyenda que sigue teniendo influencia hasta el día de hoy, incluso en el arte.

Tapacubos de colores y aros perforados: años 50 y del rock and roll de los 60

Más allá del floreciente sector del automovilismo, las llantas de chapa de acero se utilizaban cada vez con más frecuencia, ya que se podían fabricar de forma mucho más eficiente y en grandes cantidades. El pionero 170 Berlina de 1931 fue el primero en rodar con estas llantas. Mercedes‑Benz perfeccionó aún más el diseño a principios de los años 50. Además de los tapacubos, se añadieron aros embellecedores perforados como nuevo elemento de diseño. Este reluciente refinamiento cromado se estrenó en 1954 con el Ponton-Mercedes Type 220 y la berlina Mercedes-Benz Type 300 b, el llamado “Adenauer-Mercedes”. En los años 60, el imponente Mercedes-Benz 600 Pullman  también rodó sobre estas ruedas de chapa de acero. Esta emblemática berlina fue considerada el mejor automóvil de su época y no solo fue popular entre los líderes estatales: músicos como John Lennon y Elvis Presley también condujeron el 600 Pullman.

El legendario 300 SL Coupé “Gullwing” no montaba ruedas de chapa de acero puro, sino que era el primer modelo de Mercedes‑Benz con ruedas de material compuesto. El disco de la rueda era de acero y la llanta de aluminio. Con su diseño icónico, el 300 SL cautivó a la gente y al mundo del cine. Entre sus numerosos propietarios famosos se encontraban estrellas de Hollywood como Sofía Loren, Gina Lollobrigida, Tony Curtis y Clark Gable.

Las “ruedas barrocas”, rebelde década de 1970

Otro motivo artístico icónico y que sigue siendo popular es otro de los modelos con alas de gaviota: el legendario Mercedes‑Benz C 111 de 1969. Con su silueta superdeportiva y sus llantas de aluminio forjado de múltiples radios, es un icono del diseño de los años 70. Conocidas cariñosamente como “llantas barrocas”, el diseño de múltiples radios caracterizó el estilo de muchas series de modelos en los años 70 y 80, por ejemplo, los modelos de la Clase S 280 S a 300 SEL, las berlinas “Stroke Eight”, los modelos SL y SLC y la serie de modelos de la Clase S 116.

Las llantas de aleación, la salvaje década de los 80

En los años 80, Mercedes-Benz desarrolló llantas de aleación de 15 y 8 agujeros, de líneas minimalistas. Las llantas de superficie completa se utilizaron en todas las series de modelos, incluido el 190 E 2.3‑16, el Mercedes-Benz más dinámico de la época. El "Baby Benz", como se lo apodaba cariñosamente, se convirtió rápidamente en otro vehículo de culto. Uno de ellos se puede ver hoy en el Museo Mercedes-Benz: el 190 E 2.3 conducido por el actor Nicolas Cage. Otro ejemplo destacado de la llanta de 15 agujeros es la berlina 500 SEL (serie 126), que también tenía Michael Jackson en su flota.

Nueva variedad de diseños de ruedas a partir de la década de 1990.

Una de las novedades más destacadas de esta época es la llanta «EVO II» de la berlina de altas prestaciones 190 E 2.5‑16. Esta llanta sigue siendo objeto de culto, ya que procede directamente del mundo de la competición y sustituye a las pequeñas llantas de aleación de múltiples agujeros que se utilizaban hasta ahora.

Ruedas para modelos eléctricos

Los nuevos retos y tendencias en el diseño de llantas surgen de los modelos puramente eléctricos, que exigen llantas optimizadas aerodinámicamente para lograr eficiencia y autonomía, además de un aspecto atractivo. El conflicto formal entre las superficies cerradas necesarias desde el punto de vista aerodinámico (las llamadas "aeroskins") y los diseños deportivos y elegantes con el máximo efecto de tamaño se resuelve con la tecnología del torneado de alto brillo. Se utilizan radios y detalles plateados, así como superficies negras, en un juego de contrastes intenso. Por primera vez, en la gama de vehículos eléctricos de Mercedes‑Benz se ofrecen llantas aerodinámicas con insertos de plástico optimizados en cuanto al peso. Las llantas, que presentan elementos con motivos de estrellas plateadas estampadas en caliente sobre un fondo negro, tienen un aspecto especialmente llamativo.

Un elemento aerodinámico destacado en la actualidad es la llanta de 20 pulgadas para el SUV EQS. Con una cubierta aerodinámica en forma de estrella de plástico, se adapta perfectamente a los flancos de los neumáticos para SUV, que también están optimizados aerodinámicamente.

Mirada al futuro: VISION EQXX

Los prototipos y los vehículos de exhibición ofrecen un primer adelanto de lo que está por venir. El prototipo operativo VISION EQXX se desplaza sobre llantas ligeras de magnesio forjado con un diseño de radios dobles semitransparentes con detalles en oro rosa. Hasta ahora, el magnesio solo se había utilizado para las ruedas en competición. Junto con los neumáticos, que tienen una baja resistencia a la rodadura y una geometría aerodinámica mejorada, las llantas aumentan la autonomía. El récord del EQXX de más de 1.200 kilómetros con una sola carga de batería se debe también a esto.

Ya se trate de prestaciones o de estatus, las ruedas seguirán siendo en el futuro un medio de expresión de sofisticación y cultura. Las “ruedas de burbuja” del Mercedes‑Benz VISION AVTR ofrecen una perspectiva futurista. La película “Avatar” sirvió de inspiración para su diseño. Las bandas de rodadura y los radios iluminados se fusionan para formar un tipo de escultura de rueda completamente nuevo.