Naybet, el autor del primer gol del Dépor en Champions, cumple 50 años
Parece que fue ayer cuando el Dépor ganó la liga con Naybet ocupando el puesto de central pero ya ha llovido. Tras quedar campeones en Riazor el 19 de mayo del 2000, los herculinos disputaron su primer encuentro de Champions el 13 de septiembre de ese mismo año frente al Panathinaikos. En Atenas, el defensa marroquí anotó al final del partido el gol que suponía el empate a uno y el primer tanto de la historia del Deportivo en la Liga de Campeones. Esta semana, Nourredine Naybet también está de celebración. Cumple 50 años.
Ocho años haciendo historia en A Coruña
Noureddine Naybet nació el 10 de febrero de 1970 en Casablanca. Su primer equipo fue el Wydad de esta ciudad, donde debutó en 1989. En 1993 se fue al Nantes y en 1994, al Sporting de Lisboa. Al Dépor llegó en el 96, equipo que no abandonó hasta 2004, cuando se fue a Londres para jugar en el Tottenham, hasta su retirada en 2006. En su palmarés tiene tres ligas marroquíes, un campeonato africano de clubes, una Copa de Portugal y una Liga, una Copa del Rey y dos Supercopas españolas con el Deportivo. Con la selección jugó 115 partidos y metió cuatro goles.
Sigue vinculado al mundo del fútbol
En la actualidad, Nourreddine Naybet es uno de los ex jugadores designados por la Confederación Africana de Fútbol (CAF) para formar parte de un grupo especial de estudio técnico. En concreto, será responsable de inspeccionar los estadios que albergarán las clasificaciones de la Copa Mundial 2022 de Qatar.
Un gol que nadie olvida
El 13 de septiembre del año 2000 el Deportivo disputó su primer partido de la Champions League y lo hacía en Atenas, ante el Panathinaikos en una cita para la historia. A ocho minutos del final, con un gol en contra, apareció la inspiración de Pandiani para, sin ángulo y sin otro recurso para salir de la situación, recurrir a una chilena que se convirtió en un pase de la muerte. Junto al punto de penalti esperaba Naybet, un clásico en los ataques desesperados del Dépor buscando la épica en los últimos minutos.
Eso fue lo que encontró el central marroquí, que con un disparo mordido a puerta vacía inauguraba para el Dépor y sus aficionados la primera de las muchas alegrías que ofrecería la Champions League. Un gol, una carrera hasta el centro del campo y una celebración que se ha colado ya en los recuerdos de los deportivistas en su bautizo en la máxima competición continental, la verdadera puerta de entrada al olimpo del fútbol.