¿Por qué nos gusta la comida picante? Esta es la explicación científica que hay detrás
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El picante es una reacción de dolor y calor de nuestro organismo
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Tras el picor, llega la liberación de endorfinas y el placer
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No hay punto medio, las comidas picantes te gustan o no te gustan. La población que está en el bando que detesta el picante no entiende cómo hay gente que disfruta con esa sensación de picor y quemazón, al mismo tiempo que hay personas del bando que ama este tipo de comida que no saben explicar exactamente por qué les pasa.
En este artículo, con motivo del Día Internacional de la Comida Picante, que se conmemora cada 16 de enero, vamos a resolver esta duda, y es que el gusto por la comida picante tiene una explicación científica detrás.
El picante no es un sabor
Antes de profundizar en la cuestión, es importante matizar que el picante no es un sabor. "Existen cinco sabores principales que captamos a través de las papilas gustativas de nuestra lengua: dulce, salado, umami -que tiene que ver con las proteínas-, ácido y amargo", diferencia Jorge Ángel, más conocido en redes como @enfermerojorgeangel.
Entonces, ¿qué es exactamente el picantes? Pues bien, "en realidad el picante es una reacción de nuestro organismo a ciertas sustancias, como por ejemplo la capsaicina. Cuando la lengua entra en contacto con esa sustancia envía señales de calor y dolor a nuestro cerebro, pero el picante ni sabe ni huele", explica el mismo.
El papel de la capsaicina
El matiz de todo esto que "una vez que ya pasa la sensación de picante, se generan endorfinas y llega el placer", matiza el conocido divulgador de primeros auxilios en redes y agente de emergencias SAMU, Miguel Assal.
Al masticar esto alimentos picantes se liberan moléculas: capsaicina en los pimientos picantes, piperina en la pimienta negra y alicina en el ajo y las cebollas crudas. Estas "activan químicamente las terminaciones nerviosas libres situadas en la lengua. Por tanto, el picante es una sensación de dolor ante la cual el cuerpo humano reacciona emitiendo dosis de endorfina y serotonina, lo que finalmente puede causar una sensación de placer", detalla un trabajo del Centro de Investigación en Nutrición y Salud (CINUSA).
Además de placer, esta liberación de hormonas tienen cierto efecto analgésico; de hecho, a las endorfinas se las conoce coloquialmente como la "morfina del cuerpo".
No obstante, este experto recomienda no pasarse con el picante "porque puede crear resistencia y no solo te va a doler la lengua, sino también su expulsión; esto podría afectar a tu sistema digestivo. Que sepas que lo te gusta no es el picante, sino el dolor y el placer posterior".
Alimentos para reducir el picante
Aunque la comida picante guste, es posible que en alguna ocasión este calor y dolor sea insoportable; cuando esto ocurre es importante saber qué debemos ingerir. Si bien existen multitud de creencias sobre la capacidad que tienen algunas bebidas específicas para mitigar el ardor, todavía faltan investigaciones cuantitativas que las respalden.
Uno de estos estudios, realizado por la Universidad Estatal de Pensilvania, comprobó como actuaban siete bebidas diferentes frente al ardor provocado por la capsaicina, las cuales fueron: leche desnatada, leche entera, zumo de frutas con azúcar, cerveza sin alcohol, Coca-Cola normal, agua carbonatada y agua a temperatura ambiente.
Aunque comprobaron que todas las bebidas redujeron la sensación de dolor, las que mejor lo hicieron fueron la leche, independientemente de si era entera o desnatada, y el zumo de frutas.
