Julen Agirrezabala y los costes del galimatías en la portería del Athletic

Como es lógico, el ruido que genera la posible salida de Nico Williams del Athletic Club al FC Barcelona de Joan Laporta este verano, acompañado de todo tipo de polémicas y hasta de algunos actos cuasi delictivos con el mural de Lutxana-Barakaldo, copan la atención en el recién abierto mercado de fichajes este martes 1 de julio. Cita que fue la antesala del sorteo del calendario de LALIGA que dejaba estas fechas señaladas para los pupilos de Ernesto Valverde.

Pero en el caso del conjunto de San Mamés tampoco hay que olvidar que otro nombre propio está muy presente encima de la mesa desde hace tiempo con idea de poder salir. Se trata del portero Julen Agirrezabala, que comparte la portería rojiblanca con el internacional absoluto Unai Simón y que teóricamente tiene pie y medio en Mestalla para hacerse cargo del trabajo bajo los palos del Valencia CF de Carlos Corberán.

En espera de ver si liman los flecos de la operación, basados en las posibles cláusulas que se guarde cada club, en Bilbao todo el mundo entiende que es bueno que Julen salga de Lezama ante la asunción general de que Unai Simón, el inminente nuevo curso, tendrá más peso en competiciones como LALIGA y la Champions League.

Como afectado colateral, las miradas se posan también en Alex Padilla. El meta de Zarautz está cedido en Pumas de México, donde según informa AS recuperarlo costaría alrededor de 300.000 euros, cuando los aztecas pagaron algo más, unos 400.000 mil por su cesión. En principio es la opción más sensata y lógica, cuando ha jugado en la Primera española lo ha hecho de cine dejando paradas para la videoteca por ejemplo a Robert Lewandowski.

Lezama una fábrica de porteros para el Athletic y LALIGA

Y con el buen hacer con los porteros en Lezama, claro, también está la opción de activar a Mikel Santos en el primer equipo como escudero del de Murgia, si bien parece un frenazo en su carrera, ya que el cancerbero bilbaíno tendría muy pocos partidos a priori en plena etapa de formación. De quedarse a tiro de Valverde en el filial de Jokin Aranbarri, Oier Gastesi es quien buscaría una cesión.

Así que por último el runrún se iba hasta Miranda, donde el bilbaíno Raúl Fernández Cavada tiene un año más tras firmar una enorme temporada que casi les lleva a los de Alessio Lisci a Primera división... pero una cláusula que le permite salir.

Su posible llegada a los 37 años recordaría al golpe de timón dado en su día por Joaquín Caparrós con Armando Ribeiro, al que se fichó desde un Cádiz que estaba en Segunda B en ese momento. Pero en principio parece más un hit de las RRSS que una baza sopesada en Lezama.