Tanguy Nianzou, la 'pieza' más complicada en el tablero del Sevilla

Sin rendimiento, sin fiabilidad, sin confianza y, por si fuese poco, por un precio inasumible en este Sevilla. Tanguy Nianzou, y mira que son muchos los que se acumulan en el Sánchez-Pizjuán, se ha convertido en el problema no más importante, sino más complejo y caro en este equipo. Y no parece tener solución.

Porque el empeño, el sacrificio y las ganas de Tanguy Nianzou son innegables. El zaguero francés llegó a Nervión con la ilusión de dar un importante paso en su carrera, de seguir los pasos de tantos centrales franceses exitosos en Sevilla, pero la realidad ha sido muy diferente. Sus lesiones le han ido frenando continuamente y aunque él siempre le ha transmitido a sus entrenadores su disposición, todos acabaron rindiéndose.

En un Sevilla que se construye, como se ha podido ver en sus redes sociales, con piezas de ajedrez, Tanguy Nianzou no es el rey, ni la reina, ni posiblemente el alfil, es un peón, pero a precio de estrella. 

Nianzou, la ilusión de García Pimienta y el trabajo con Matías Almeyda

Hablar de una posible salida de Tanguy Nianzou del Sevilla este verano es irreal. El galo lleva meses sin competir y aunque a principios de curso mostró buenas sensaciones -con errores graves-, conseguir cualquier acuerdo por él este verano parece prácticamente imposible.

Es por ello que Nianzou, que ya ha empezado su particular pretemporada y apenas ha tenido vacaciones, tendrá que volver a convencer a Matías Almeyda como consiguió, en su día, convencer a García Pimienta.

El ex de Las Palmas estaba encantado con él. Presumía de su poderío físico, de sus cualidades por alto y de su buen juego en la salida de balón, pero se acabó lesionando. Duró dos meses. 

Nianzou intentará durar más, que su físico le permita demostrar la razón por la que Monchi apostó por él, pero la realidad es que, a día de hoy, es una pieza compleja, cara y sin fiabilidad en el tablero sevillista.