Kia tiene la alternativa buena y muy barata a los coches chinos

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Sencillo, pero ideal para la ciudad y con un precio imbatible
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No tiene la etiqueta ECO, pero su consumo no llega a 5 litros cada 100 km
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Cuesta 4.650 euros más que el Kia Sportage híbrido, pero es el rey de las ventas en su segmento
El Kia Picanto acaba de renovarse. Llega con un diseño fresco, siguiendo la línea marcada por modelos como el Niro o el Sportage. Un aire moderno que lo hace más atractivo sin perder su carácter de coche urbano. Compacto, práctico y con una propuesta clara: competir con los coches chinos en el terreno del precio.
En cuanto a medidas, el Picanto mantiene su perfil contenido. Mide 3.595 mm de largo, 1.485 mm de alto y 1.595 mm de ancho. Su batalla de 2.400 mm asegura una buena estabilidad. El maletero, con 255 litros mínimos y hasta 1.010 litros máximos, sorprende en un coche tan pequeño. Espacio suficiente para el día a día.

Pequeño y sencillo, pero muy eficiente
Lo más llamativo es el precio. La versión de acceso arranca en 15.880 euros, según la web de Kia. Una cifra muy ajustada si se tiene en cuenta todo lo que ofrece. Frente a las propuestas chinas que se presentan como las más baratas, este Kia demuestra que un coche de una marca consolidada puede ser igual de asequible.
El motor de entrada es un 1.0 gasolina con 67 CV y un par máximo de 96 Nm. Va asociado a una caja manual de 5 marchas y siempre con tracción delantera. Su velocidad máxima es de 161 km/h y necesita 14,6 segundos para pasar de 0 a 100. El consumo es muy contenido: 4,8 litros cada 100 km.

El equipamiento de la versión Concept es sorprendente para un modelo tan asequible. Trae aire acondicionado, navegador Kia Connect, compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay, cámara de asistencia al estacionamiento y un completo sistema de conectividad. Todo lo necesario para un uso moderno y cómodo.
Es la alternativa de Kia a los coches chinos
A esto se suma un amplio paquete de seguridad. Incorpora sensores de aparcamiento traseros, control de crucero, asistente de luces, frenada de emergencia y mantenimiento de carril. También reconoce señales de tráfico y cuenta con un sistema de detección de fatiga. Un equipamiento que muchos rivales solo ofrecen en versiones superiores.

Con todo esto, el Kia Picanto se convierte en una de las mejores alternativas a los coches chinos. Es barato, está bien equipado y lo respalda una marca con trayectoria y confianza. Una fórmula sencilla pero eficaz: un coche urbano con precio bajo y calidad garantizada.