Sergio Francisco se la juega ante el Mallorca: una final en la jornada 6
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La Real Sociedad ha firmado su peor arranque liguero desde el año que descendió
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Son solo cinco las jornadas que se han disputado en LaLiga EA Sports, pero la situación de la Real Sociedad ya empieza a ser preocupante. Más aún tras el paupérrimo partido ante el Betis. No sólo por los resultados, lo más importante en esto del fútbol, sino por las sensaciones y la dinámica. El cuadro donostiarra ha firmado su peor arranque liguero desde que acabó descendiendo a Segunda hace 20 años. Y como suele suceder siempre, se empieza a mirar al banquillo con Sergio Francisco como gran señalado.
De momento no hay rumores de una posible destitución, pero sí hay una evidencia: el partido ante el Mallorca parece clave. Sobre todo teniendo en cuenta que el siguiente partido será ante el Barcelona a domicilio. Una victoria el próximo miércoles en Anoeta podría calmar las aguas, pero un empate o una derrota empezarían a poner a la diana al nuevo técnico de la Real.
Sergio Francisco y el fantasma de la destitución
Ante el Betis, los de Sergio Francisco mostraron probablemente su peor cara de todo el curso. Perdió 3-1, pero lo mejor fue el resultado, pues los verdiblancos perdonaron varias ocasiones muy claras de gol en una segunda mitad paupérrima por parte del cuadro vasco.
El problema es que no fue un partido aislado, sino la continuidad de una racha de resultados que parece no tener fin. Sólo 2 puntos de 15 posibles y ninguna victoria en estas cinco primeras jornadas ligueras que se unen a la segunda vuelta de la pasada campaña, en la que la Real sólo logró 18 puntos, números propios de un equipo de descenso.
Se marchó Imanol Alguacil con la sensación de etapa acabada, pero el club, con Jokin Aperribay a los mandos, decidió dar continuidad al proyecto apostando por Sergio Francisco, un técnico de la casa y sin experiencia en la élite, y un mercado con sólo cuatro incorporaciones marcado por la salida de Zubimendi.
La situación es preocupante, pero está lejos de ser dramática. Al menos de momento. Un triunfo ante el Mallorca aportaría calma y tranquilidad a un proyecto que acaba de comenzar. Pero una posible derrota, o incluso un empate, empezarían a poner las miradas en Sergio Francisco antes de visitar al Barcelona y con el parón de selecciones de octubre en el horizonte.
