Estos airbags low cost empiezan a ser un problema fatal

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Unos airbags de imitación acaban con siete vidas en Estados Unidos
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No se descarta que el problema pueda atravesar fronteras y aparecer en Europa
Un recambio barato puede salir carísimo. La seguridad de miles de conductores está en duda tras descubrirse que unos airbags falsificados se comportan como auténticas granadas. El caso, destapado en Estados Unidos, ya se investiga a nivel federal.
El fabricante señalado es DTN Airbag, con sede en China. Sus infladores contienen químicos inestables que, en lugar de desplegar el cojín de seguridad, estallan violentamente. La explosión libera fragmentos metálicos y plásticos a gran velocidad. Una pieza pensada para salvar vidas se convierte en un arma.
La NHTSA ha confirmado al menos siete siniestros vinculados a estos componentes. Cinco de ellos con resultado mortal. El bajo precio explica cómo han llegado al mercado: se ofrecen como recambios low cost, hasta diez veces más baratos que los originales. Muchos talleres los han montado sin saber que estaban ante una imitación peligrosa.

Los airbags de imitación acaban con siete vidas en Estados Unidos
La industria ha dado la voz de alarma. Bob Stewart, directivo de General Motors, asegura que estas piezas están “condenadas a fallar”. No se trata de copias inocuas, sino de clones inseguros que imitan un diseño complejo sin respetar normas básicas de calidad.
Entre los casos más duros está el de Destiny Byassee, una joven madre de Florida. Viajaba a baja velocidad, apenas 48 km/h, cuando su coche sufrió un choque. El airbag defectuoso explotó y los fragmentos alcanzaron su cuello. Murió en el acto. Un accidente menor terminó en tragedia.
El propio secretario de Transporte de EE. UU., Sean Duffy, lo ha dejado claro: quien instale estos airbags comete un delito grave. Ha exigido a los talleres que extremen el control de las piezas y eviten introducir en el país un producto “peligroso para las familias”.
No se descarta que este problema pueda cruzar fronteras. Aunque DTN asegura no operar en EE. UU., sus productos aparecen fácilmente en Internet y se anuncian para mercados como el europeo. El riesgo está sobre la mesa: un airbag barato puede terminar siendo una sentencia de muerte.