La historia de Arai, la marca que empezó haciendo cascos para obreros y ahora es el referente en MotoGP
-
Arai tiene una historia detrás de su éxito
-
BMW Motorrad Vision CE: revolución eléctrica urbana sin casco ni límites
En Arai destacan por su particular y curioso método de trabajo, pero lo que poco gente sabe es la historia tan bonita que tiene detrás. Porque todo comenzó en la década de los 50, cuando Hirotake Arai, que trabajaba produciendo cascos para los obreros, tuvo la fantástica idea de utilizarlos para los motoristas. Hasta ese entonces, todas las personas que viajaban en moto lo hacían sin casco, y sin ningún tipo de protección en sus cabezas, poniendo en peligro sus vidas.
Un invento que fue un antes y un después, pues a partir de ahí, su éxito fue imparable. Cada vez eran más los motoristas que se acercaban a su taller a conseguir uno, y tenía el detalle de amoldarlos a los tamaños y las cabezas de cada cliente en particular. Pero, al principio, todo era por pasión, no por negocio. Hasta que su hijo, Michio, entendió que necesitaban dar un salto, y salir de Japón. Había estudiado en Estados Unidos, y aprovechó uno de sus viajes para llevarse una maleta repleta de cascos.
Posteriormente, fue el turno de llegar a Europa, donde también se vendían a pares. Sin grandes campañas, pero el boca a boca y la seguridad que proporcionaban hizo el resto. Y no dejaron de crecer, pero manteniendo viva su esencia, que perdura hasta el día de hoy, fabricando los casos a mano, con sello de autor, y pasando varias revisiones antes de ponerlos a la venta. Con la fiabilidad japonesa que les caracteriza, y un aspecto en particular: no hay dos iguales, y son limitados.
70 años después, siguen trabajando de la misma forma, y no cambian ni cambiarán nunca, como han dejado claro. Un homenaje a Hirotake, que comenzó de 0 y consiguió que su marca, la tan reconocida Arai, sea popular en todo el planeta. Hasta el punto de haber llegado a MotoGP, donde son varios los pilotos que los usan.