El gran desconocido de Suzuki es la compra maestra

El Suzuki Swift es uno de esos coches que pasan desapercibidos, pero que esconden un valor difícil de igualar. Pequeño, ágil y bien equipado, este utilitario japonés se ha ganado, sin hacer ruido, el título de compra maestra. En un mercado dominado por el Toyota Yaris o el Dacia Sandero, el Swift ofrece una alternativa más equilibrada y racional.

Con 3,86 metros de largo y 1,73 de ancho, el Suzuki Swift se mueve con soltura en ciudad. Su tamaño compacto facilita los aparcamientos imposibles, pero sin renunciar a un maletero de 265 litros, suficiente para el día a día. Además, su peso ligero y la buena puesta a punto del chasis hacen que sea un coche divertido de conducir.

Así es el Suzuki Swift más barato

Bajo el capó monta un motor 1.2 de gasolina con sistema MHEV (híbrido ligero). Entrega 83 CV y 112 Nm de par, cifras modestas, pero más que suficientes para moverse con soltura por ciudad y carretera. Su consumo medio de 4,4 l/100 km y la etiqueta ECO de la DGT son dos argumentos de peso que lo colocan por delante de muchos rivales.

El Swift no busca sorprender por potencia, sino por equilibrio. Su cambio manual de cinco velocidades, su respuesta lineal y su suavidad de marcha lo convierten en un coche cómodo y eficiente. Acelera de 0 a 100 km/h en 12,5 segundos y alcanza los 165 km/h, datos más que aceptables para un coche urbano.

Por menos de 80 euros al mes

En cuanto al equipamiento, Suzuki no se ha quedado corta. De serie incluye faros LED, pantalla táctil de 9 pulgadas con Android Auto y Apple CarPlay, cámara trasera, control de crucero adaptativo, detección de peatones y ángulo muerto, entre muchos otros sistemas. En seguridad, el pequeño japonés juega en liga de mayores.

El precio también sorprende. Parte de 20.400 euros, pero puede quedarse en 17.361 euros financiando, con cuotas desde 79 euros al mes. Una cifra difícil de igualar para un coche con esta tecnología y nivel de equipamiento.