La curiosa reflexión de Coudet tras perder el Girona - Alavés: "A veces los cachetazos ayudan a mejorar"

Eduardo Coudet ha dejado una reflexión muy curiosa después de la derrota del Deportivo Alavés frente al Girona en la jornada 12 de LALIGA EA SPORTS. El técnico argentino, tras valorar positivamente el trabajo de sus jugadores, reconoce que la primera parte no salió como a él le habría gustado. Eso sí, reconoce que este tipo de derrotas, que ha definido como "cachetazos", a veces ayudan a que el equipo despierte.

"Haciendo un análisis rápido, en la primera mitad no fuimos nosotros, lo que venimos haciendo normalmente, desde el juego, la energía y lo que transmitimos como equipo. A pesar de haber tenido la más clara ahí con Denis, nunca mostramos lo que habitualmente mostramos. En la segunda mitad sí competimos mucho mejor, los fuimos a buscar, pero eso de no tener unos buenos 45 minutos, en LALIGA lo pagás, y así fue", asegura.

No obstante, la segunda parte le dejó más satisfecho: "La segunda mitad fue mucho más pareja. Estuvimos más cerca del empate, que quizá nos hubiera abierto espacios y beneficiado. El aprendizaje es que en LALIGA no puedes entrar dormido ni regalar minutos. Hay muy buenos jugadores, todos los equipos juegan bien. Este es un equipo que tiene muchos jugadores de jerarquía. A pesar de terminar siendo un partido parejo, nos vamos con las manos vacías. Creo yo que gran culpa tiene esa primera mitad", asegura.

La reflexión de Eduardo Coudet: "Estaríamos en Champions"

En este sentido, Eduardo Coudet es consciente de cuál es su liga: "Son todo derrotas por la mínima y con la sensación de poder tener muchos puntos más. Después LALIGA te acomoda. Si hubiésemos sacado todos esos puntos estaríamos prácticamente en Champions y no es nuestra realidad. Sí que se puede perder, pero no perder el eje de la idea y de lo que nos preparamos. No me gustó esa primera mitad. Es una liga complicada, tenemos 15 días para prepararnos y mejorar y el tiempo y el trabajo siempre vienen bien para crecer. Nos gusta más mejorar ganando, pero vamos aprendiendo, vamos mejorando y tenemos que seguir dándole cosas al equipo. Tenemos gente joven que va creciendo con los partidos y tenemos que trabajar", reflexiona.

De este modo, el argentino está contento, por lo general, con su equipo: "Las sensaciones son que podríamos tener más puntos. No podemos perder las sensaciones de que el equipo juega bien, sea en casa o fuera. De una manera futbolera, sabe a qué juega. El equipo sabe a qué juega independientemente del sistema que podemos usar, sabemos jugar dentro del campo. Tranquilidad", siente.

"Podemos perder pero no habíamos tenido un lapso de minutos tan largo para encontrarnos. Cosas para corregir. A veces los cachetazos ayudan a darse cuenta y a mejorar para el próximo, pero a mí ya no es que me preocupe el próximo, sino que me ocupa el próximo, el otro, el otro y sostener. Sostener las cosas, eso es lo que más le ocupa a un entrenador.

Los elogios hacia sus jugadores: "Trabajan como animales"

Así las cosas, el técnico elogia el trabajo de su plantilla, aunque siente que no hay tiempo para relajarse: "Tenemos un grupo de jugadores que trabajan como animales. De mi parte, darles mayores herramientas para que se sientan mejor y convencerlos. A mí nunca me da tranquilidad, para mí es el siguiente partido, o el que estás jugando o el que estás por jugar. Ese es el que tenés que mirar. Tranquilidad no tenés que tener nunca en el fútbol, si no no sentiríamos nunca esa sensación difícil de contar en la panza cuando vas a jugar un partido. Hay que centrarse en lo inmediato", asevera.

Por último, se disculpó por explayarse demasiado y alargar mucho sus respuestas, algo que hizo mucha gracia a los presentes en sala de prensa: "Estoy hablando demasiado, me parece, pero me agarraron temprano y el avión sale dentro de un rato. Les pido disculpas".