Sólido en el Tartiere
El Real Oviedo ya piensa únicamente en el partido ante el Lugo. Los azules volverán a jugar como locales, después de un nuevo resultado positivo a domicilio, en una temporada en la que jugar como visitante no está siendo un castigo como en campañas anteriores. Pero la base sigue siendo el Carlos Tartiere, en el que los azules tuvieron algún tropiezo, que parecen haber olvidado según los últimos resultados. Los tres últimos encuentros como local, han sido tres victorias para el Real Oviedo.
Además tres partidos en los que se concedieron pocas ocasiones. Dos victorias por 1-0, contra el Tenerife y contra el Alcorcón y una por 2-1 ante el Cádiz. Resultados cortos que demuestran que los objetivos de Anquela se van cumpliendo. Si se mira más hacia atrás todavía, se llega al empate a ceros contra el Málaga, en un partido en el que los andaluces apenas generan peligro hacia la portería de Champagne. Son diez puntos de los últimos 12 y un gol encajado en los cuatro últimos partidos.
Conseguir esa fuerza en el Carlos Tartiere es clave para los azules, hablando además del futuro más cercano. De los próximos siete partidos en el calendario, cinco son como local. Únicamente tendría que salir el Real Oviedo a Mallorca y a El Molinón, ya que tendría el partido en Reus, que en la segunda vuelta no se está jugando. Una fase marcada en rojo en el calendario, de la que podría salir beneficiado si consigue prolongar los buenos resultados en el Tartiere, en el que ya cayeron en esta segunda vuelta dos equipos de arriba como Cádiz y Alcorcón.
La próxima prueba será contra el Lugo, que llega metido en la zona baja de la tabla. Es el equipo que marca la salvación y lleva cuatro partidos sin ganar, pero los azules no quieren confianzas.
