Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe

El Real Sporting de Gijón ha caído por la mínima en su visita al Real Valladolid (1-0). Un partido que se ha desequilibrado de lado pucelano merced a un solitario gol de Roque Mesa en la segunda mitad, minutos después de que Diego Mariño le detuviera un penalti. Una derrota que, a la espera  de que se complete la jornada, deja a los de David Gallego a seis puntos de los puestos de promoción.

El partido comenzaba con un ritmo frenético, con un Sporting con muchísima personalidad, pero con el Pucela bien plantado, haciendo gala de su posición en la tabla. Los rojiblancos querían el balón y llegaban a la zona de tres cuartos, pero no conseguían finalizar las jugadas. Mientras tanto, los blanquivioletas ponían a prueba a Mariño en varias ocasiones, aunque sin demasiado peligro, principalmente comandados por un Cristo González que tenía el gol entre ceja y ceja.

La primera del Sporting no llegaría hasta el ecuador de la primera mitad. Quién sino Uros Djurdjevic la iba a tener con un disparo a la media vuelta desde el vértice del área. Pero Jordi Masip apenas tenía dificultades para atajar el balón. Tanto Djuka como Fran Villalba y, sobre todo, Aitor García tenían ganas de dar un golpe de autoridad en Zorrilla, todos estaban muy activos pero algo erráticos en las combinaciones, y poco más de sí dio el Sporting en lo ofensivo en los primeros 45 minutos.

Lo más destacado de esta primera parte fue, por desgracia, la lesión de Guille Rosas, que a los 43 minutos tenía que abandonar el terreno de juego por un latigazo en los isquiotibiales. El lateral derecho precisaba de la camilla para dejar el verde, y Gallego se veía obligado a dar entrada a Bogdan Milovanov en su lugar.

En la segunda parte, el Valladolid salía a por todas desde el primer minuto, y en apenas 30 segundos tenía una ocasión clarísima tras un gran pase de Toni Villa que dejaba a Cristo solo ante Mariño, pero el disparo del canario lo despejaba el vigués con los pies. Un paradón que salvaba al Sporting, y que se convertiría en la tónica habitual de la segunda parte delantero blanquivioleta

Los rojiblancos también buscaron el gol. Djuka volvió a tener otra ocasión con un disparo de primeras y a la media vuelta desde la frontal que se marchaba cerca del larguero de la portería de Masip. No llegaba el gol, y Gallego movía el banquillo para dotar de aire fresco dando entrada a Víctor Campuzano y Gaspar Campos.

La más clara llegaría en el área del Sporting, con un derribo de Bogdan sobre Toni Villa que el colegiado decretaba como penalti a favor del Valladolid. Pero ahí estaba nuevamente Mariño, para, otra vez con los pies, despejar en lanzamiento de Roque Mesa. No conforme, el vigués se lucía acto seguido con una gran estirada a un nuevo intento de Cristo.

Pero tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe. Y tuvo que ser Roque Mesa, que se tomaba la venganza ante Mariño, quien desequilibraba la balanza tras una buena jugada en ataque que finalizaba con un disparo abajo imposible para el meta rojiblanco.

El Sporting iba a sufrir, pero también la iba a tener, y muy clara, por medio de Aitor, con un disparo a bote pronto desde dentro del área que se le marchaba alto. Los de Gallego iban a dar un paso adelante en el tramo final, acechando el área blanquivioleta, y la tenía nuevamente en la cabeza de Babin, pero se topaba con Masip. Poco más iba a dar de sí el Sporting, que se volvía a Gijón de vacío.

ElDesmarque te trae el mejor resumen en vídeo del Valladolid-Sporting.