Una eliminación que le 'condena'
Emocionado, roto y sin palabras. Así atendió Sergio Busquets, centrocampista del FC Barcelona, a los micrófonos de Movistar Liga de Campeones en cuanto terminó la humillación de Anfield. Pudo ser por su sentimiento culé, por su dolor en la derrota. También por su horrendo encuentro.
Sergio Busquets cerrará en pocas semanas una de sus temporadas más irregulares en la entidad azulgrana. El que fuese el mejor pivote del mundo dejó serias señales de preocupación en Anfield. Los jugadores red le pasaron como aviones, le hicieron sentir un "juvenil".
"Han sido mejores que nosotros. Han dominado el partido desde el principio. Cuando te hacen un gol, te aprietan arriba y te roban, es muy difícil. Hemos tenido ocasiones para marcar el gol que necesitábamos y no ha podido ser. No puedo decir nada más. Pedir disculpas. Después de Roma, que vuelva a pasar esto... poco más que decir", explicaba casi con lágrimas en sus ojos.
"Cuando un equipo te juega tan arriba, no coges los segundos balones y no aprovechas los goles... con el ambiente, y con los goles que iban haciendo... Hemos tenido ocasiones, ha sido una pena, pero es difícil ahora decir cosas. Pedir disculpas a la afición. Es muy duro irse así", agregó.
Ante el Liverpool Sergio Busquets confirmó lo que era un secreto a voces: el FC Barcelona deberá trabajar este mismo verano para conseguir la firma de un hombre que consiga sustituirle cuando él no esté... o cuando esté al nivel mostrado este martes.
Rakitic lo ha intentado, Arthur se ha asomado y Vidal, a su estilo, se ha parecido. De Jong puede también amoldarse, pero es evidente que el club necesita a su nuevo '5' para hacer olvidar el bajo rendimiento de una de las leyendas de la entidad.
