La llegada de Griezmann agiliza la operación salida

El FC Barcelona ha hecho oficial este pasado viernes el fichaje de Antoine Griezmann. Un movimiento que podría ayudar a aligerar la plantilla de cara a la próxima temporada.

El conjunto culé anunciaba su fichaje por las cinco próximas temporadas. Un movimiento que obligará a los dirigentes azulgranas a vender a algunos futbolistas para recuperar los 120 millones de euros gastados en el crack francés.

Ahora, son varios los integrantes de la plantilla actual que han quedado en una situación bastante delicada de cara a la próxima temporada. Jugadores entre los que destacan los brasileños Malcom y Philippe Coutinho o el francés Ousmane Dembélé.

Todos los focos apuntan a Dembélé, cuyo destino podría ser el Bayern de Múnich. El propio Niko Kovac, entrenador del conjunto bávaro, no se cortaba a la hora de analizar este posible refuerzo: "Si el Barça finalmente se lleva de regreso del PSG a Neymar, deberían aumentar las posibilidades de llegar a un acuerdo con Dembélé. También es un gran jugador", comentaba.

Junto al francés, Philippe Coutinho es otro de los jugadores que tienen abierta la puerta de salida. El brasileño, recientemente campeón de la Copa América con su selección, podría cambiar de aires tras una experiencia nada gratificante en el Camp Nou.

El futbolista no vería con malos ojos servir como moneda de cambio en la llegada de Neymar desde el PSG, pero lo que más le atrae es la idea de volver a la Premier League, competición en la cual brilló con el Liverpool, uno de los que más atentos está a la situación del brasileño.

La tercera opción sería la de Malcom, quien cuenta con un gran interés detrás del Everton inglés. El equipo de la Premier League estaría dispuesto a ofrecer 35 millones de euros por sus servicios. Una cantidad casi irrechazable para Bartomeu, teniendo en cuenta que son seis menos de los 41 que costó hace justo un año.