Ansu Fati, mejor que Vinícius y 45 millones menos
Dicen que las comparativas son odiosas. En el fútbol, sin embargo, se antojan trascendentales para evaluar en redimiento de cada fichaje, de cada jugador o de cada plantilla. En este caso, los números dan la razón al FC Barcelona con Ansu Fati, que en su primera temporada en la élite tiene mejores números que Vinícius, por quien el RReal Madrid pagó 45 millones de euros hace tres años.
Los números de Ansu Fati
Con el atacante blaugrana hablamos de un jugador de la cantera. Nacido en Guinea Bissau y con apenas 17 años, Ansu Fati ha dado el salto esta temporada desde el juvenil al primer equipo, casi sin pasar por el filial. La mala planificación deportiva del pasado verano ha hecho hueco al atacante en los planes de Ernesto Valverde, primero, y Quique Setién después.
Ansu Fati ha participado esta temporada en 29 partidos, la gran mayoría partiendo desde el banquillo. Suma 1.183 minutos en los que ha anotado siete goles y ha dado una asistencia. La gran mayoría de esos números corresponden al campeonato doméstico, donde ha marcado seis tantos. El último este mismo domingo frente al Villarreal.
📺 ¡EN VÍDEO! | @ANSUFATI aprovecha los minutos haciendo lo que mejor sabe. ¡Así anotó el canterano el 1-4 en La Cerámica! https://t.co/Iz7V0JrWv3
— ElDesmarque Barça (@ElDesmarque_FCB) July 5, 2020
Vinícius, menos goles en más minutos
El brasileño, por su parte, costó 45 millones de euros al Real Madrid cuando sólo tenía 16 años, aunque hay informaciones que aseguran que esa cifra asciende hasta los 61 kios. Vinícius, que la próxima semana cumplirá ya 20 años, afronta su segunda temporada en el primer equipo, aunque el curso pasado empezó jugando con el Castilla.
Aún así, sus números son peores que los de Ansu Fati. Vinícius suma cinco goles y dos asistencias esta temporada, repartidos a lo largo de 35 partidos en los que acumula 1.679 minutos. El jugador del Real Madrid marca esta temporada un gol cada 335 minutos, mientras que el atacante blaugrana anota un tanto cada 169, prácticamente la mitad. Los números, a pesar de la diferencia de edad, son incuestionables.
