Otra tarde en chanclas

El Deportivo Alavés se mantuvo a flote este miércoles con un meritorio triunfo en la jornada 36 de LaLiga Santander ante el RCD Espanyol, por 2-1, en un partido descontrolado con numerosas ocasiones, que dio vida al equipo albiazul para la luchar por la permanencia.

Las matemáticas aguantarán a los vitorianos en Primera División al menos hasta este jueves y si el Cádiz no gana ante la Real Sociedad, los babazorros tendrán otra jornada más para engancharse a la máxima categoría.

Miguel de la Fuente adelantó a los locales en el minuto 7 y en el 14 empató Raúl de Tomás desde los once metros. En la segunda mitad, Gonzalo Escalante anotó el definitivo 2-1 que dejó vivo al Glorioso, al menos unas horas.

Los albiazules entraron a morder en un partido a vida o muerte para ellos y en el minuto 7 se colocaron por delante con un gol de Miguel de la Fuente que llegó tras una recuperación que aprovechó el vallisoletano.

Fueron 15 minutos de ida y vuelta. Incluso el argentino Gonzalo Escalante pudo sumar el segundo en un contragolpe, en la jugada posterior a ponerse por delante el Glorioso, pero su disparo se marchó fuera con todo a su favor.

Posteriormente llegaron varias decisiones del colegiado que encendieron a una grada que apoyó a su equipo en todo momento, aunque antes del inicio del choque mostró su descontento.

El árbitro señaló penalti de Nahuel Tenaglia sobre Raúl se Tomás que confirmó el VAR después de revisar un posible fuera de juego, que no fue por milímetros, y el propio delantero lo transformó desde los once metros.

Seguidamente, de nuevo el árbitro decidió anular un gol de Luis Rioja por falta previa de Gonzalo Escalante sobre Diego López, al interpretar que le impidió despejar un balón llovido que acabó en las botas del extremo alavesista.

El partido bajó de revoluciones tras un inicio descontrolado, pero el Alavés lo siguió intentando a balón parado, aunque los periquitos eran los que combinaban con más acierto.

Los tres defensas espanyolistas acudieron al rescate de su equipo para sacar bajo palos un balón que estuvo a punto de colarse en la meta visitante, después de que Fernando Pacheco evitara el segundo del Espanyol, en las botas de Nico Melamed.

Los dos porteros tuvieron trabajo y se lucieron. Como el meta periquito, que se quitó el balón de encima en dos remates de Miguel de la Fuente y de Gonzalo Escalante en dos jugadas consecutivas.

El partido se fue al descanso con 1-1, aunque perfectamente podría haber concluido con un resultado muy distinto a tenor de las numerosas ocasiones generadas, sobre todo por los locales.

La segunda parte arrancó con la expulsión de Yangel Herrera, que dejó a su equipo con diez durante 45 largos minutos.

El conjunto local se lanzó a por el segundo gol tras verse en superioridad, pero le faltó claridad de ideas en sus aproximaciones.

Miguel de la Fuente y Luis Rioja fueron los activos en unos minutos de domino local, con un rival que renunció a jugar con media punta tras verse en inferioridad numérica.

La presión que ejerció el Alavés tuvo premio. El argentino Gonzalo Escalante empujó en el segundo palo un saque de falta botado por Jason Remeseiro desde el pico del área en el minuto 59 y volvió a adelantar a los vitorianos.

El equipo de Julio Velázquez no dejó de insistir con varios saques de esquina consecutivos y llegando por ambos flancos, pero sin encontrar rematadores.

El detalle de la tarde lo puso Jason Remeseiro con una gran jugada personal por la linea de fondo en el minuto 78 que acabó rematando Escalante y detuvo Diego López, bien colocado.

Los babazorros buscaron el tercero con ahínco ante un Espanyol metido atrás, que no conseguía salir de su campo y únicamente buscaba balones largos para la carrera de sus atacantes.

La peor noticia para los albiazules fue la lesión muscular de Gonzalo Escalante, el jugador más en forma del equipo en los últimos duelos, que tuvo que dejar el partido en una recta final en la que los periquitos se lanzaron a por el empate.

El final fue de infarto para la grada local. Al filo de los 90 minutos, el VAR revisó un penalti sobre Martín Aguirregabiria, pero el colegiado no lo señaló por un fuera de juego previo.

En la jugada posterior perdonó Joselu Mato el tercero y la victoria se la llevó el Alavés.