Marcelo Bielsa, la persona

Es difícil llegar a conocer en profundidad a Marcelo Bielsa. Al menos ante las grandes audiencias. El actual técnico del Athletic se protege del inmenso foco de las cámaras que lo alumbran con una máscara impenetrable. Rara vez levanta la vista en sus comparecencias.
Usa, la mayoría de las veces, un tono monocorde. Sin estridencias. Evitando expresar emociones ni con el rostro ni con la voz.
Al argentino, muy celoso de su intimidad, le molesta enormemente que los gestos que dedica a personas anónimas en el ámbito de la privacidad salgan a la luz. Pero hay algunas historias que, por su enorme dimensión humana, no pueden evitar el eco. Son esos pequeños episodios que ayudan a comprender la excéntrica personalidad del 'Loco' de Rosario. Un hombre con defectos y vistudes, como todos, pero que sobre todo es fiel a sus principios. De eso no cabe duda alguna. Su relación con otro 'loco', narrada con sumo cariño por La Nación, es una prueba más de ello.
El protagonista es Patricio Huerga, un profesor de educación física con una gran meta en la vida: estimular la plenitud de personas discapacitadas a través de la natación. En Argentina le conocen su escuela como "Los Tiburones del Paraná". Patricio un día se planteó el reto de que sus especiales alumnos nadasen en las aguas de uno de los ríos más importantes de América del Sur. Lo expuso ante los padres de los chicos. Y le tomaron por loco, augurando que todos se ahogarían. Pero hubo quienes correspondieron a esa confianza que el profesor había depositado en los futuros héroes. Le dejaron hacer. Y lo consiguieron. Los hitos de los 'Tiburones' han llenado muchas páginas de periódicos. Incluso portadas. Una de ellas, compartida con Bielsa y Newell's. Así empezó la relación entre Patricio y Marcelo.
El profesor de educación física, en su afán de conseguir una piscina para sus alumnos, se desplazó a Santa Fé para reunirse con María Eugenia Bielsa, directora de Infraestructura Escolar. La arquitecta resultó ser hermana del ahora entrenador del Athletic. Que no solo ayudó en todo lo posible a Patricio, sino que transmitió a Marcelo su historia y la admiración que este hombre sentía por su trabajo pese a la eliminación de Argentina de Mundial de Corea y Japón a las primeras de cambio.
Bielsa le telefoneó varias veces. En una ocasión le prometió una visita. Y, para sorpresa del profesor Huerga, cumplió su compromiso en 2009, como seleccionador de Chile. "Yo admiro en ustedes la capacidad que tienen de trabajar con el dolor", le confesó. Resulta que el entrenador de las grandes estrellas del fútbol, de los grandes ídolos de masas, estaba impresionado por Patricio, un guía de otro tipo de héroes. Anónimos, pero de un mérito incalculable a nivelde valores, sacrificio y superación.
"Lo admiro por los valores que transmite. No solamente desde lo teórico del planteamiento sino porque lo lleva a la práctica, que siempre es lo más difícil. Pensar, decir y hacer todo para un mismo lado. A eso le dicen coherencia, pero cuando yo era niño, mi papá me decía que eso era honradez. Eso te hace digno: digno de ganar o de perder en lo que hagas, pero siempre digno de vivir", le comentó.
"Es mejor ser prestigioso que popular. Es más importante el recorrido con el que uno llega a un lugar que el éxito o no que se obtenga en la búsqueda. Los hechos son más significativos que las palabras. Demostrar es mucho más importante que hablar. Para conseguir el éxito es inevitable el sufrimiento y la humildad. La autoridad la de sabiduría, el poder lo da la dedicación hasta el sacrificio en el trabajo, en el servicio. Estoy sorprendido porque los chicos no tienen ejemplos de madurez, no conviven con nadie que les ofrezca un modelo de madurez. Ni los padres, ni los maestros. En cualquier tarea se puede ganar o perder, lo importante es la nobleza de los recursos utilizados; eso sí es lo importante", son otras de las conclusiones que Bielsa compartió con Huerga en su encuentro. "¿Que vino a buscar? No lo sé. Tuvo un gran gesto. Se interesó muchísimo con nuestro proyecto. Cada vez que viaja por el mundo y ve un artículo periodístico sobre discapacidad, lo recorta y me lo manda por correo".