El Athletic negocia el blindaje del pichichi juvenil Iñaki Williams
Iñaki Williams se ha empeñado en pulverizar todos los registros: 28 goles en 26 partidos se encuentra, desde luego, al alcance de unos pocos elegidos. El instinto depredador no se enseña, no se aprende, se posee o no. Es innato, y Williams lo lleva en la sangre.
Potente y rapidísimo, el espigado ariete del Juvenil de Honor rojiblanco es el máximo responsable de que el equipo pilotado por Gontzal Suances domine la Liga dejando en la cuneta a Osasuna y Real Sociedad.
Un diamante en bruto que el Athletic quiere blindar. Su status ha variado sensiblemente respecto a su llegada a Lezama el pasado verano, y negocia desde hace semanas una revisión de su contrato.
Sus emolumentos son modestos y su cláusula muy factible como para no abortar ya el riesgo de fuga. Varios clubs de empaque están atentos a su evolución y, de momento, las posturas para su renovación y prolongación de su ligazón en Bilbao están todavía alejadas.
A sus 18 años, Williams es el máximo artillero de los cuatro grupos de División de Honor, por delante del céltico Santi Mina (27 en 18 partidos) y el canario de la UD Las Palmas, Héctor Hernández, con 24.
También estrenó su cuenta goleadora en la prestigiosa Nextgen Series, a las órdenes de Murua y Larrazabal, contribuyendo al 5-0 al Marsella. El primer día que se paseó por Lezama algunos bromearon con su evidente parecido físico con Ballotelli.
Aunque mucho menos esculpido en el gimnasio, la misma cresta en la cabellera, el color de la piel y sus andares desenfadados. Además, les une su matrimonio con el gol, aunque Williams es un chico tranquilo y centrado, muy alejado de la vida disoluta del delantero italiano.
Iñaki Williams (15-6-94), nacido en Bilbao, pero criado en el populoso barrio pamplonés de La Rotxapea, mide 1’86, superable por su todavía temprana edad, se formó en el CD Pamplona hasta que el curso pasado recalase en Lezama empujado por su fama de killer.
Ha recibido recientemente el premio Cachorro de Oro, por medio del rotativo ‘Cantera Deportiva’. La perla rojiblanca no le gusta definirse como futbolista, pero su ídolo es Didier Drogba, a quien venera- “me gustaría jugar con él antes de que retire”-, apunta, y ansía que le entrenase “Bielsa o Guardiola”. Precisamente con el técnico rosarino ya se ha ejercitado en alguna ocasión.
Anhela “seguir en el Athletic muchos años más y jugar en el nuevo San Mamés con el Athletic”. Un deseo que se puede plasmar en los despachos ya que el acuerdo parece lógico.
Junto a Sabin Merino y Gorka Santamaría parece el relevo para alternar Baskonia con Bilbao Athletic. El pichichi juvenil puede desenvolverse indistintamente como delantero centro o en ambas bandas, con su larga zancada y su verticalidad busca puerta constantemente.
En su cuenta de twitter se define como “príncipe de mi princesa”. Parece que el enamoramiento con su novia le espolea en los rectángulos de juego.
