Cazalilla: "Beñat me dijo en Navidad: míster, igual ya no vuelvo a Cuenca"

Antonio Cazalilla, el que fuera entrenador de Beñat Etxebarria en el Conquense por petición expresa a Caparrós, recuerda que le advirtieron que le hablaba “despacio” en castellano y que en la cena de Navidad el centrocampista le remarcó: “Míster, igual ya no vuelvo a Cuenca, echo de menos a mi familia”.

“Me había enfrentado al Bilbao Athletic con el Conquense y me llamó la atención que tanto Beñat como Raúl no habían jugado con continuidad en la segunda vuelta; me gustaban. Hablé con Ziarreta para el préstamo y, aunque era su último año, me lo cedieron. Me extrañó”, confiesa el técnico andaluz, muy del estilo de su amigo Caparrós, forjado en banquillos modestos como el Alcazar, Guijuelo y Villarrobledo, que todavía rememora el lujo de dirigir al nuevo volante rojiblanco: “Es un chaval genial, encantador, el típico que se hace en el vestuario por su forma de ser”. 
No obstante, el representante del futbolista de Igorre le avisó que le hablara el castellano con cautela. Cazalilla, alucinado, le respondió: “No me fastidies, tío”, pero después no se cumplió la amenaza: “Me entendía perfectamente”, bromea. Beñat salía por primera vez de su pueblo con 20 años. “Fue una experiencia para madurar. También para Raúl y Diego Simón”, en referencia al ahora lateral izquierdo del Gernika. Los tres coincidieron en aquel Conquense. 
En la cena navideña de despedida le advirtió: “Míster, yo igual cuando me vaya lo mismo ya no vuelvo, echo de menos mucho a  la familia”. Le contestó: “Tú estás tonto, o qué”. Habló con el ex 10 del Betis y le tranquilizó: “Le dije que no pasaba nada, que eran cosas que les pasa a todos en el fútbol, que hay que aceptar los cambios”. Beñat completó aquella campaña 30 partidos y marcó 6 goles, casi se colaron en el playoff de ascenso: “En momentos puntuales cogió la responsabilidad”.  
Desde entonces han alimentado la amistad y se conectan por wasap. Cazalilla desvela que potenciaban el disparo a larga distancia: “Nos picábamos en los entrenamientos. Apostaba una coca cola y se ponía a chutar hacia Raúl y Sebas, el otro portero. Marcaba unos cuantos...”. 
Cazalilla sostiene que para el Athletic su fichaje “es un acierto” y también para él, apostilla: “Se va a encontrar supercómodo, ha crecido muchísimo como futbolista”, ensalzando al que apodaban, Gattuso. Rompe con otro mito: “Tiene mucha más resistencia de la que parece, desde la grada puedes pensar al verle que no aguanta los 90 minutos, pero trote, trote, lo hace”. 
También entiende que Valverde lo puede ligar con Herrera e Iturraspe en el mismo triángulo de la sala de máquinas: “A Ernesto le gusta mucho dominar los partidos con el balón, tener posesiones largas. Beñat es perfil de futbolista del Barça. Herrera es mas estético, pero no tiene el golpeo de Beñat, que es mas de pase, un típico Xavi”. 
También le echa un cable a Raúl, ahora cuestionado: “Hay que trabajarle mucho la confianza, estar atento con él, hay cosas que le pueden afectar, pero tenía y tiene condiciones de Primera, con Beñat no lo sabía”, concluye sincero.