Txikon parte este viernes hacia el Campo 2
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"¡Llegó el día! Mañana salimos para arriba". Con este mensaje, escrito de su puño y letra, el alpinista vizcaíno Alex Txikon anunciaba que este viernes, sobre las 07:00 horas en Nepal (las 02:30 hora española), junto a dos de los sherpas que le acompañan, Nurbu y Cheppal, partirá del Campo Base (a 5.250 metros de altura) en dirección al Campo 2 del Everest (a 6.400 metros de altura). Allí tienen previsto pasar la noche del viernes al sábado. Al día siguiente se les sumarán en dicho campo los otros tres sherpas, Nuri, Pemba y Furba.
Los integrantes de esta aventura han pasado los últimos cinco días en el Campo Base debido a las malas condiciones atmosféricas registradas durante toda la semana, con vientos huracanados de hasta 190 kilómetros por hora en la cima del Everest y de hasta 90 kilómetros por hora en el campo base.
Durante este tiempo, Txikon y su equipo han continuado con el proceso de aclimatación necesario para la expedición y, al mismo tiempo, han seguido tomando imágenes para la película que se está grabando en estos momentos sobre este reto.
La mejoría del tiempo registrada en las últimas horas, las buenas perspectivas de cara a la próximas semana, y la llegada a media mañana de este jueves de nuevo material -incluye 600 metros más de cuerda- van a permitir al equipo de Alex Txikon retomar desde el viernes el proceso de ascensión al Everest.
"Parece ser que entre martes y sábado de la próxima semana hay una 'ventana' de buen tiempo con unas condiciones óptimas respecto de los días anteriores, que pueden favorecer el intento de hacer cumbre. El lunes no será bueno, con fuertes vientos y quizá ese día no seamos capaces de alcanzar el campo 4 a 7.950 metros", explicaba Txikon.
La idea del alpinista lemoarra es seguir subiendo durante los próximos días al resto de campos montados hasta la fecha, el C3 (a 7.400 metros) y el C4 (ya en el collado sur del Everest, a 7.950 metros de altura), para comprobar si estas localizaciones se han visto afectadas por las duras condiciones de los últimos días y reponer, si fuera necesario, el equipamiento perdido o deteriorado, tal y como ocurrió la semana pasada en diferentes puntos del recorrido equipados previamente.
"Puede que desaparezcan entonces todas nuestras opciones de alcanzar la cumbre, pero vamos a intentarlo con todo. En cualquier caso, hoy es un día de mucho nerviosismo, estamos muy sensibles. Todo esto casi siempre desaparece cuando doy el primer paso del campo base para arriba. La suerte está echada; sólo habrá un único ataque a cumbre y trataremos de escalar como lo hemos hecho hasta ahora", relataba Txikon.