Txopi, un alquimista en La Florida

No hace falta ser un lince para escribir, sin miedo a la 'represalia de la polémica', que 'Txopi', 'medio centro' procedente del Arenas, no era 'santo de la devoción' de Carlos Docando, su entrenador en el Club Portugalete.

Se dice que "cada maestrillo tiene su librillo", y en el del técnico getxotarra, que cumple su segundo ciclo en el vestuario de La Florida, el nombre de Angel Gandara, 'Txopi', se empezó a difuminar de seguido a que llegara a Portugalete en sustitución de Aitor Calle.
  'Mister' que fue cesado tras el ya 'famoso 4-1' frente a una Cultural que se sigue aferrando al liderato del Grupo 4 de la Tercera División tras la consumación de la jornada 28. De 'jugador franquicia' con Calle, luciendo incluso el brazalete de capitán, al ostracismo de la 'grada' sin necesidad de que su nombre fuera escrito en la parte interna de cientos de conchas de ostras.  En aquel centro del campo que heredó Docando figuraban Ukerdi Corres, Txopi, Parra y Gabri Ortega. Tomando en cuenta que Asier Parra, 'Parrita', ya no es jugador de 'oro y hulla', sino 'verdinegro' de Las Llanas, el resto del cuarteto ha sido el mismo que figuraba en el campo cuando el colegiado Ojeda decretaba el final de la partida. Un encuentro que, más allá de los tres puntos de oro para el cuadro local, al cronista le ha dejado una agradable sensación y un poso de optimismo.
  Y no porque los noventa y dos minutos hayan dejado a la vista un dechado de virtudes, sino porque, a partir de la incorporación al juego de 'Txopi', minuto 65, y con el luminoso castigando la vista de la parroquia con las estrecheces del 2-1, el hacer de los discípulos de Docando ha dado un salto de calidad tan evidente que, en lugar de un futbolista defenestrado, diríase que lo que por el verde de La Florida comenzaba a evolucionar era la figura de Nicolas Flamel.
Un notario francés de mediados del siglo XIV conocido como el 'alquimista inmortal', no en vano cuentan que fue visto en la India en 1830, por qué no ser él, haberse cambiado de nombre, mentir sobre su cuna salmantina, despistar a la gente con su currículo de futbolista cuando, en realidad, lo suyo es la Alquimia, ese afán por descubrir la piedra filosofal, la panacea universal y la manera de transformar la materia futbolística en oro...
  El elixir de la vida. Alargarla como si hacia la inmortalidad. Ahí lo tenemos. Nadie daba por el ni la moneda de la que el árbitro se sirve para el sorteo inicial. A Carlos Docando no le había entrado por los ojos. Ocupaban otros su ideario. La fortaleza descomunal de Cubería, el galope incesante de Txaber Ajuriagoikoa, el equilibrio de Ukerdi Corres, la elegancia desgarbada de Gabri Ortega. Uffff...¡lo tenía harto difícil Ángel Gandara, 'Txopi'!...  Y cuando todo parecía perdido, a punto de tirar la toalla el que llegó de Gobela de la mano de su 'valedor' 'Etxeba', zas, cae lesionado en Fadura Mikel Cubería, zas, no regresa al campo 'Txaber' luego del descanso, zas, Docando, intuyendo osadía en jugar con dos puntas y Gabri junto a Ukerdi en el centro del campo, temiendo por la suerte del 2-1, llama a Ángel Gandara, "¡Txopi, Txopi!"...
  La mano del entrenador posada sobre el hombro del discípulo. Le está instruyendo. Cuatro cosas: dos detalles...y lo básico. No se necesita más. El hombre que se dispone a saltar al campo nació en el XIV, fue visto en el XIX, ahora se sirve del disimulo de su vestimenta para seguir a lo suyo.  Acaba de recibir órdenes y ahí lo tienen. Piedra filosofal cuyo destello inunda a Ukerdi, a Gabri, a Garmendia, a Infante, en fin, a todo gualdinegro que alcanza la influencia de su juego. El Portu, un tanto timorato, "reservón", habrá quien diga, empieza a brillar, es su juego, o su fuego, se enciende el rectángulo, aplaude la grada, calor y calor, las palmas echan humo, los jarrilleros se gustan esmerándose en la labor que los convierte en virtuosos. Tocar y tocar.

"Que corra el balón y no el jugador", decía Urbano Anda. Fútbol combinatorio. Fruto de él, o de la 'jiribilla' de Infante, o del azar, o de la Fortuna que a veces dicta justicia, Gabri 'ejecuta' a Xuban desde el punto de penalti. Desde 'lo de la Cultu', cuando Aitor Calle oficiaba, quizás el último tramo de partido de más calidad que se ha visto en La Florida. Antes...  Pronto, muy pronto, en el 3', Arbeloa, que recuperaba titularidad, cazó  una caída y alojó, de volea, a pie cambiado y por la base del palo largo, la pelota en la portería de 'las antiguas casetas'. En el 16', Infante, sin oposición, cruzó raso desde el vértice derecho del área con el inigualable premio del gol. Cohetes en La Florida. Pólvora humedecida, sin embargo,  cuando, en el 26', Markel Ezkurtza, más solo que el 'Principito' en su planeta, cabeceó un centro malicioso que partió de la estrategia. El recorte de la distancia anestesió al Portu, también el partido, a tiro de gol llegó el 'Anaita' a los vestuarios.
  En la reanudación, todo fue una inquieta e intensa espera. Hasta que Carlos Docando, no viéndolo claro, rescató del ostracismo a 'Txopi', un hombre que se había 'preñado' de Alquimia  en sus días y noches de larga espera. Fue saltar al verde, mirar a sus compañeros... y contagiarlos de tanta sabiduría e intuición como había acumulado en la celda de su dique seco. El Portu la empezó a tocar. Se asociaban los futbolistas gualdinegros. Y a mis ojos de cronista ya todo le resultó más grato.  La 'Cultu' lidera la tabla con 54. Cuatro puntos más que un Portu que se aferra al viceliderato. Beasain, tercero, y Real, cuarta, cierran los puestos de play off. Quinto, el Alavés , un puesto que podría pertenecerle al Sestao si el River (3-3) hubiera sabido, o podido, aguantar el cero goles a tres que, en el 75', reflejaba el luminoso de Gazituaga. Bravo por el Zamudio de 'Yundi, Josu Etxaniz eta euren jokakide maiteok.
Por Luis María Pérez, Kuitxi. Periodista y exfutbolista del Portugalete