Athletic: Chapa y pintura, pero aún falta el motor
LaLiga Santander poco a poco pierde el apellido “de las estrellas“. Francia ganó el Mundial sin un balón de oro, los “grandes“ sufren cada semana, se acabaron los paseos, el VAR hace más grandes las áreas y la Premier juega a otra velocidad.
Mientras tanto, Tebas quiere proponer el fútbol en conserva, enlatado entre la TV y los horarios. Pero en Ipurua, la máquina del tiempo programa cada dos semanas un partido en blanco y negro, un choque sin concesiones, que se viste de gala si llega el equipo de Bilbao.
Exquisita la afición, magnífica anfitriona una vez más, calle y plaza compartida, pero cuando rueda la pelota sobre el césped no se hacen prisioneros. El balón sabe que vivirá 90’ dividido y los futbolistas que el partido se juega por tierra, mar y aire, se anima desde los balcones.
Berizzo conocía el terreno y cómo se las gasta Mendilibar, ya ha sufrido sobre este terreno de juego donde el balón pasa de área a área en un saque de banda o un abrir y cerrar de ojos.
Durante catorce días de cueva valoró los riesgos que otra derrota podría causar en la moral de su tropa en la “bombonera“ azulgrana y no dudó un segundo. Con Aritz recuperado y Beñat en boxes, el objetivo era saltarse el protocolo del centro del campo y el guión de trabajo durante 120 días: posesión para los armeros y pelota a seguir para Aduriz y Williams.
La semana viene dura y toca administrar efectivos
El 'Toto' delineó entre los 18 que cuentan hasta ahora, incluyendo la novedad de Herrerín que recupera un puesto en la convocatoria y en el campo que se ha ganado con pico y pala, buen regreso.
Los cuatro de atrás muy juntos, subidas las justas para De Marcos y Yuri. Por delante Dani García, ya sabía lo que le esperaba (Mendi le ha enseñado a sobrevivir) y dos jugones, López y Muni, que veían pasar balones entre nubes o chocaban con el muro de músculo armero.
Raúl, Aduriz e Iñaki con la caña preparada, pero el Eibar atrás no te regala ni la sombra.
El Athletic Club ha estado en el taller en el parón de Liga, chapa y pintura, toca remar muy juntos, sin huecos a las espalda en los próximos partidos, por ahora no ha llegado el nuevo motor.
Por Aitor Elizegi, Cocinero y empresario
Blog: 'Licencia para aliñar'
