Garitano "despista" a La Catedral
Unai Simón, a punto de señalar Del Cerro Grande el final del partido, adelanta su posición hasta alcanzar la medular con el fin de, a balón detenido, colocar el cuero en el corazón del área. Antes, a un sector muy amplio de San Mames le había dado por ponerse a pitar a su equipo. Sonido de viento que se repitió cuando el juego llegó a a su fin. De los 23.000 espectadores, tres cuartas partes habían desalojado las tribunas. Hacía frío. El Athletic perdía 1-3. La suerte estaba echada. Pero para que hechos como los reseñados se produjeran, mucho, si no todo, tuvo que ver el proceder de Gaizka Garitano desde que, en la rueda de prensa de Balaidos, el técnico de Derio empezara a valorar la 'triada' sevillista a la que los leones deberían hacer frente en el terrible plazo de una semana...
Tras una victoria de 'más de tres puntos', aquí se escribió que "es imposible que este Athletic descienda a Segunda División". Porque la imagen del equipo había sido de lujo. Se hablaba únicamente de la liga. La Copa era un recipiente que se debía despreciar porque tan solo podría aportarle un espantoso deje de hiel al paladar rojiblanco. Garitano, sin embargo, me empezó a 'despistar' cuando declaró: "La Copa despierta mucha ilusión en Bilbao". Anda, y a mí, subir con Juanito Oiarzabal al Everest. Pero como es del todo imposible, me conformo con hollar, en jornada de buen tiempo, el imponente Mont Blanc, techo de los Alpes en suelo galo-italiano.
Así las cosas, llegó el Sevilla de la Copa con Caparrós al frente para disfrutar durante todo un fin de semana de San Mames, Bilbao, Bizkaia y ese Lezama en el que, si por él hubiera sido, se habría eternizado en fantásticas jornadas de tecnificación: "Dejad que los niños se acerquen a mí". Joaquín Caparros y "la sangre rojiblanca hirviendo en mis venas". Es sincero. Y socio. Quiso votar pero no pudo. Voto "secreto...pero yo iba con Manolo Delgado".
Hubo otro tiempo, con él en el banquillo del 'San Mames del Arco', en el que 'su Athletic' devoró, "hasta el rabo", al Sevilla de Del Nido. Tiempos pasados que, sin duda, fueron mejores. En estos de hoy en día, tan revueltos ellos, el Athletic, de la mano de Gaizka Garitano, se esmera, con mimo y acierto, en colocar a este Club, cabeza de cartel en los rotativos deportivos de todo el mundo, en el lugar que le corresponde. La zona noble de la tabla. Hacia ella va el equipo. Y sigue yendo. Viento en popa, a toda vela...luego de destrozar en Vigo a la armada celeste.
¿A cuento de qué, entonces, despertar Garitano el subconsciente de tantos y tantos que ni siquiera vieron subir la Gabarra en celebración por la última Copa ganada?: "La Copa despierta pasiones en Bilbao". Pero bueno, a qué estamos: ¿a ligas o a copas?...
Juego de cartas
Tres cartas le enseñó el 'mago de la competición' al técnico del Athletic. Copa, Liga, Copa. Con la ventaja de que las tres se le mostraban boca arriba. Podría haber tomado una y plantarse. ¡Quítale al mago la carta de la Liga, Gaizka Garitano!...Mas el hijo de 'Ondarru', ante mi pasmo, se apropió del 'rey de copas'. Ya con ella en su poder, se veía forzado a imbuirse en un peligroso 'juego de cartas'...
Al apartar hasta ocho jugadores de los once que escogió para derrotar al Celta, el 'despiste' de Gaizka hacia los suyos se puso en marcha. La grada de San Mames, encendida por la proclama copera post Balaidos, esperaba de un once muy mermado, de esos llamados 'de circunstancias', que diera buena cuenta del Sevilla para que la vuelta en el Pizjuán se convirtiera en un mero trámite. Pero el error venía de atrás: "La Copa ilusiona mucho a nuestra gente"...
La alineación sí era de recibo. Casi. Aduriz. Aritz: ¿Qué demonios hacía el 'Zorro' de ariete en un partido de copa, sí, pero en el que pintaban 'bastos'? ¿Pretendía que el único 'nueve casero puro' del que dispone esta plantilla se metiera entre pecho y espalda ¡180 minutos en menos de tres días?...¿Adu, ariete titular en San Mames rodeado de 'suplentes'? Capa, Nuñez y Cordoba repetían: pero es que el primero es muy fuerte, el segundo, una roca, e Iñigo, muy joven.
Así las cosas, ese jugar con fuego provocó una 'quemadura' que descartó a Aduriz del partido. Poco antes, un salto mal medido de Nuñez fue el inicio de un fallo en cadena que posibilito la puesta por delante del Sevilla en el luminoso. San Mames, abatido. Con Aduriz dañado, el VAR emborrachó a Del Cerro hasta hacerle entender que entre un centímetro y un metro no existe diferencia.
La desventaja revolucionó a los leones. Salieron a degüello y empataron. Dejaron desguarnecido su 'pobaldo'...y el Sevilla, a su antojo, lo redujo a cenizas: dos centrales haciendo pasillo como en una boda, un balón perdido y muerto que el 'enemigo' vivifica. 1-3. La Catedral, enojada, se volvió contra ls suyos. Como si se sintiera engañada. Y hasta traicionada. Y todo porque "La Copa es algo que despierta mucha ilusión en Bilbao"...
El domingo, Garitano está obligado a coger de manos del 'mago de la competición' la carta de la liga. Y jugar con ella al engaño. Para, recuperada parte de su tropa, y tal vez con el aporte de Ibai Gómez, desmontar el poderío de una baraja hecha toda ella a base de 'reyes' de los cinco continentes. ¿Estará Aduriz?...
Si no llegara a tiempo, resultaría del todo lícito que el cronista mirara hacia atrás, hasta llegar a ese jueves, día 10, hora 19:30, cuando la pelota se puso en movimiento y, en el juego de cartas, sentado en su 'silla del nueve', estaba la 'esperanza blanca'. Ese ariete que, fuera, no, porque en lo lejano reina Williams, pero en casa, sí. Porque el domingo se espera a un Sevilla que en ataque se alimenta del error no forzado, y en defensa se coloca cual muralla alta y ancha.
Copa. Cáliz. Hiel...Pero es que, pudiendo haber escogido tan solo la carta de la liga, ¿por qué demonios, Gaizka, se te ocurrió despertar en la Catedral el 'espíritu de la Copa'?...Sea como fuere, que la parroquia abroncara a los leones, así durante como al final, me da a entender que esa 'mayoría ruidosa' es ajena al incalculable valor, en puntos y autoestima, que tuvo y tiene la maravillosa victoria que el Athletic le arrancó de las manos a los 'celestes de Cardoso'.
¿Acaso no se era consciente que de los 'héroes de Balaidos' tan solo ocho eran de la partida...y que Aritz Aduriz, suplente en Vigo, no debería haberlo sido?...
¿Liga o Copa?...Tan sólo se puede escoger una carta: "Los futbolistas no bebemos"...
Por Luis María Pérez, 'Kuitxi', exfutbolista y periodista