La esperanza veloz
Ante el Sevilla y en San Mamés, por la décimo-novena jornada de la Liga, se produjo una curiosa resurrección: la de Iñaki Williams. Dos dianas marcó en La Catedral, su casa, a cual más brillante, que dio tres valiosos puntos al Athletic que lo ubican con 22 puntos en el puesto número 15 de la clasificación.
A Williams le llevó 770 días volver a anotar en San Mamés. Lo hizo doblemente y contribuyó, con sus carreras, con su velocidad, con su contribución al juego colectivo, a que su equipo se alzara con la victoria.
Sus goles llegaron en un momento delicado para el Athletic. Un momento en el que cada punto cuenta, en que hay necesidad de sumar de a tres unidades más que de a una, en que el desempeño colectivo es irregular (ese equipo de faquires), en que además hay que esperar que los competidores en la zona de descenso también tropiecen en sus resultados.
El despunte de Williams coincidió con el dibujo táctico del Athletic, que jugó sin un 9 neto. De esos 9 que anclan a los defensas centrales del rival y que “obligan” al equipo a jugar con muchos centros para encumbrar a ese hombre más de punta.
Ante el Sevilla, en Liga, el dibujo táctico apuntó más a un juego de conjunto, a buscar espacios desde lo colectivo y a jugar en ese sentido, con esa idea de Fuenteovejuna –todos a una. Seguramente el tema del dibujo llevará a otro análisis cuando regrese Aduriz de su lesión; inclusive, si alguien de la junta directiva del club contempla el fichaje de Fernando Llorente por el Athletic.
Esta vez no jugamos con un 9 puro. Jugamos con Williams como el más adelantado en el frente de ataque y, a la vez, como el más libre. Williams supo ejercer esa libertad ante el Sevilla. Pese a la marca dura, pese al desgaste que podía suponer la intensidad de su despliegue.
Williams es una esperanza veloz en el Athletic. Por su rapidez, su sprint. Por la diferencia que establece con sus marcadores, a quienes suele dejar atrás, para edificar jugadas en espacios diáfanos, esperanzadores.
Alejandra Herranz, periodista y blogger
@aleherranz
