El Barakaldo tendrá que jugársela en el Rico Pérez
El Barakaldo CF no ha podido pasar de las tablas en el encuentro de ida de la primera eliminatoria del playoff de ascenso a la Liga1|2|3, que le ha enfrentado este domingo en el reparado Lasesarre al histórico Hércules de Alicante. Equipo que acudía como segundo clasificado en el grupo III de Segunda División B.
Con el arbitraje del colegiado cántabro Álvaro López-Parra, al que se le reclamaron varias tarjetas, los pupilos de Aitor Larrazabal han empatado (1-1) adelantándose con un golazo de Antonio Sánchez pero sin poder cumplir el deseo de dejar la portería a cero. Luego marcó Benja.
Ha sido un choque típico de playoffs de ascenso, con mucha intensidad, nervios, ocasiones y tiempos repartidas que deja todo por resolver. La pega es que ahora los visitantes parten con la ventaja de haber marcado fuera de su estadio y jugar en casa la vuelta.
Un primer tiempo muy gualdinegro
Los gualdinegros, con un ambientazo detrás como respaldo, salieron a por todas ante un rival que les esperaba sin crear el menor peligro sobre el marco de Viorel Bojan. Los vizcaínos, aparte de una gran ocasión de Villacañas, se adelantaban a los 16 minutos, por medio de Toni Sánchez, que descerrajaba un buen disparo desde la media luna después de que el trencilla diera la ley de la ventaja en una acción sobre Jurgi.
La presión vasca incomodaba muchísimo a los de Lluis Planaguma, que sufrieron bastante de entrada para tener presencia en la zona de ataque. Lo cierto que su gran 'label' es la solidez defensiva, casi granítica en toda la liga regular, por eso los de Larra tuvieron un gran acierto al abrir pronto la lata.
Pero los alicantinos buscaron el empate
Hasta la recta final del primer periodo no se dejaron sentir los visitantes, con algún remate poco peligroso pero bien resuelto por el meta moldavo y la zaga baracaldesa. Si bien unos pudieron hacer un segundo tanto, lástima que llegaron a estorbarse a la hora de machacar, y otros poner la igualada, el 1-0 fue sin duda muy bien valorado al descanso.
Tras adelantarse con un golazo de 'rosca' el Barakaldo dio un paso atrás a la espera de una contra mortífera que no llegó a definir en los metros finales
Momentos de agobio
El segundo tiempo arrancaba sin cambios en ambas escuadras. Bueno, en cuanto a jugadores, porque la decoración sí que fue otra. El Hércules se fue descaradamente arriba, con un envenenado remate de cabeza de Carlos Martínez, aunque fue Víctor Villacañas el que estuvo a punto de marcar a Falcón en una contra. El partido estaba muy abierto.
Larrazabal movió ficha con un doble cambio para insuflar energía fresca a los suyos. Entraban Barbosa y Dopi (que remataba una nada más pisar el césped) por Jurgi y Sergio (en el 65'), ya que se estaban pasando momentos de incertidumbre. Inicialmente pareció funcionar, porque el meta Falcón tuvo que hacer un paradón para evitar el 2-0 de Barbosa, pero Benja era quien ponía las tablas en una jugada de estrategia.
El asedio del Hércules había dado sus frutos
Mal defendida la acción y beneficiado por un rechace el exariete del Elche no tuvo más que empujarla en el 73' de encuentro. Lasesarre reaccionó con prontitud apoyando a los suyos. Barbosa trato de revolucionar el juego, la intensidad provocaba incluso algún calambre en las filas de los de Planaguma.
La última bala del técnico de Loiu fue retirar a Villacañas para dar entrada a Sergio Benito. El gol le había dado tranquilidad a un Hércules con mucho poso, que empezó a jugar con menos prisas y mayor control del esférico. De hecho Viorel tuvo que evitar el posible segundo del rival en medio de la algarabía de los 150 seguidores llegados de Levante.
Pero ya no hubo más goles. Vuelta al campo para agradecer el aliento de la afición y a preparar el combate final.
Pues ahora toca batirse el cobre en el partido de vuelta, que se jugará el domingo 2 de junio en el José Rico Pérez de Alicante, campo con capacidad para mas de 30.000 espectadores a partir de las 19.30 horas. El Barakaldo está obligado a marcar para seguir adelante.