Crónica de una derrota anunciada en el derbi vasco

"El día que lo iban a matar, Santiago Nasar se levantó a las 5.30 de la mañana para esperar el buque en que llegaba el obispo". Con estas palabras empezaba Gabriel Marquez su novela 'Crónica de una muerte anunciada'. "El día en que al Athletic lo iban a 'matar', se levantó la afición del Athletic Club a horas diversas", pero con sensaciones similares, si no la misma". Era, lo que habría de ocurrir a partir de las 2 de la tarde, un ensayo en toda regla de esa final de Copa pendiente. La de Sevilla. En un escenario cuyo nombre tiene el poder de levantar el espinazo de un gato. De erizar los pelos del sobaco. Por Dios. A quién se le ocurre encerrar al Athletic en una 'Cartuja'.

Antes, a la hora de la cena, felicidad plena en los hogares de Orio. Dicha que se expande a todas las casas de Gipuzkoa. Lo sabe el técnico de la Real Sociedad. "Para nosotros, este frente al Athletic es el partido más importante de la temporada". Lo ha ganado. ¡Qué más da si, de seguido, el equipo donostiarra vuelve a encadenar derrotas! Tras el varapalo sufrido el curso pasado, el míster realista llegaba al duelo escarmentado.

Se trataba de vengar aquella afrenta. Su modus operandi comenzó en los días previos. Sabe Imanol que el halago debilita. Fue por ello que se dedicó a regalar los oídos y los ojos de su admirado colega con mensajes que ni él mismo se creía. Ni se cree. Ni lo creerá a no ser que el 'Athletic de Garitano' encadene una racha de cinco victorias basadas en goleadas de escándalo a través de un juego primoroso.

"Está fuera del partido el Athletic", comentaban los compañeros de Movistar en el 14'. Alguien podría aprovechar para insertar chanza en una cuestión tan seria: "Les habrá dado 'el cuarto de hora". De eso, nada. El Athletic es un Club muy respetado por los que respiran fútbol del bueno. La presión de la Real era alta e intensa. El Athletic, ahogado. Y en desventaja luego del gol de 'Portu' en el 5'. "Se han encontrado con un gol muy pronto". Tocaba decir eso. Un insulto a la inteligencia... La. Real no se encontró con su gol: lo diseñó con estilismo a partir de un balón robado.

El Athletic partía derrotado de inicio. Pero se necesitaba un gol para que esa 'muerte' quedara patente a los ojos de la afición. De toda ella. Con ventaja en el marcador la Real, con un mundo por delante, se ponía a prueba la capacidad del Athletic para llevar el partido a su terreno. Y la de la Real Sociedad, para plasmar en el verde el plan concebido por Imanol Alguacil en Zubieta. Poco tiempo se necesitó para concluir que el partido se lo llevarían los visitantes. De calle. Con suficiencia. Con una superioridad insultante. Impotencia. Leones humillados. Dejados de la mano de su entrenador.

Me niego a darle 'vidilla' a las declaraciones de Garitano...

Así como a las de Iker Muniain. No soy de comulgar con ruedas de molino. No lo he hecho nunca. Con los tres puntos en el zurrón, Alguacil escenificó sus artes defensivas. Presionó hasta el ahogo al Athletic. Arriba. En el centro del campo. Y cuanto lo tenía cerca de su área, era aquello un 'dos contra uno', un cuatro contra dos. Y alejados de la pelea, se conformaban parejas de baile. Como si la Real jugara con quince futbolistas.

"Hemos anulado a la Real", argumentaba Garitano". En el centro del campo, "Vencedor y Vesga, los mejor dotados técnicamente". Es en el tramo final "donde no acertamos, Incapaces de crear, ya sean pases, paredes, remates".

"Me hago responsable de esta derrota, así como de las otras". Ya van ocho. Esta frente a la Real, sangrante. Jamás un rival había sido capaz de desnudar tantas vergüenzas. El Athletic, desnudo a los ojos de tanta y tanta gente. El equipo y su entrenador. Un capitán que promete "ver el partido y sacar conclusiones, corregir las cosas que no hemos hecho bien". Para "afrontar el duelo contra el Elche con garantías de triunfo". Se sincera Garitano. "Hemos anulado su juego pero nos ha costado crear".

Lo que Gaizka ha sido capaz de anular es el ánimo de la gente. Lo que ha invalidado es mi voluntad. Minado mis fuerzas. Las últimas crónicas, su elaboración, se han convertido en un castigo. Condena mítica. Los leones son rocas con las que cargo crónica arriba, crónica abajo.

Estoy agotado. Tanto como Jhon Coffey, el grandullón de 'La milla verde'. Condenado a muerte por un crimen que no cometió. "Estoy cansado, Jefe", le decía a su buen amigo 'Tom Hanks'. "Estoy muy cansado". Y concluye. "Solo deseo que esto termine cuanto antes".

Yo también estoy cansado, muy cansado. Imagino que el hastío de mis compañeros que cubren el devenir del Athletic es similar al mío, que su agotamiento es un calco de la fatiga mía. Como periodista al que el futuro del Athletic le inquieta, y antes de que tanta repetición acabe conmigo, me dirijo a Elizegi: "Nekatuta nago, Aitor, ahitua". Al director deportivo: "Egizu zeozer, mesedez, arren!". A los jugadores: "Sacad fuerzas de vuestra flaqueza; que si el juego no alcanza, entre en escena vuestra iniciativa.

Y por la tele, comentaristas que se rasgan las vestiduras porque el Athletic les importa. Mucho. "No sé si será cosa del entrenador, de la pizarra, de la calidad de los jugadores, de..." Pero el Athletic "debe dar un golpe de timón" antes de terminar dando bandazos hasta encallar.

Nave varada junto a la Gabarra de 'las dos ligas de Clemente''.. Y si Garitano, no ["me hago responsable de todas las derrotas"], que sea el más avezado. ¿Es cuestión de dinero? ¿Merece la pena el ahorro si es a cambio de un descenso a LaLiga SmartBank? Hago mías las palabras de Piru Gainza: "Brindo con champán al final de cada temporada".

Los motivos del más admirado por Javier Clemente. "Brindo por segur siendo equipo de Primera División". 'Los motivos de Gainza'. Que hago míos. ¡No te metas abajo; no me jodas, Athletic! No me dirijo a Garitano. Tampoco, a los leones. Le hablo a Elizegi, a Alkorta... y a los directivos que 'cortan el bacalao...

"Había soñado que atravesaba un bosque de higuerones donde caía una llovizna tierna, y por un instante fue feliz en el sueño, pero al despertar se sintió por completo salpicado por cagada de pájaros"...