El contenido disponible en esta sección está restringido para menores de 18 años.
Debe confirmar que tiene más de 18 años para acceder.
El Sevilla, que recibe el sábado al Osasuna en partido de la duodécima jornada de LaLiga, ganó 11 de los 12 últimos partidos disputados en el Sánchez-Pizjuán frente a los navarros. Los rojillos no vencen en Nervión desde 2006, hace más de tres lustros y sólo han empatado una vez en todo este periodo.
El conjunto de Jagoba Arrasate, eso sí, se ha convertido en el mejor equipo a domicilio de LaLiga Santander. Lleva cuatro victorias y el empate sin goles cosechado este miércoles en el Santiago Bernabéu. Este sábado le espera un nuevo reto, en un campo poco propicio donde el equipo de Julen Lopetegui está muy fuerte.
La última victoria de Osasuna en la capital andaluza fue en febrero de 2006, cuando venció por la mínima con gol de Milosevic. Desde entonces, encadenó una racha de once derrotas sólo interrumpida con el empate a uno (marcaron el local Jesús Navas y el visitante Pandiani) de la temporada 2008-09.
En la pasada década, entre 2010 y 2020, el Osasuna visitó Nervión en ocho ocasiones y cosechó otras tantas derrotas. La última de ellas la pasada campaña, cuando se inclinó por la mínima merced a un penalti transformado por el argentino Lucas Ocampos.
El Sevilla domina el balance global de los 52 partidos oficiales disputados en casa frente a los navarros, ya que ha sumado 34 victorias (65%) frente a los 12 empates (23%) y seis triunfos rojillos (12%). La otra vez que en el siglo XXI venció el Osasuna en Nervión fue también por la mínima (gol del Chengue Morales) en la Liga 2005-06.
Durante la centuria pasada, Osasuna sólo ganó cuatro de los 33 partidos disputados en el campo del Sevilla, el primero de ellos en la temporada 1973-74, en Segunda división, gracias a una diana de Ostívar.
Las otras tres victorias navarras en la capital andaluza, ya en Primera, llegaron en la década de los ochenta: 2-3 en la temporada 81/82 (goles locales de Santi y Magdaleno y tantos visitantes de Lumbreras, Martín e Iriguíbel); 1-2 en la 1984-85 (marcaron Orejuela y Bustingorri y acortó distancias Magdaleno); y 0-2 en la 1987-88 (tantos de Robinson y Goikoetxea).