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La Selección de Argentina está en un momento de forma espectacular. Tras ganar su partido amistoso por 0-5 a los Emiratos Árabes, la albiceleste buscará su tercera estrella en el Mundial de Qatar. Sin embargo, el equipo tendrá una presión añadida de cara al campeonato: la posible despedida de Leo Messi.
Hasta no hace mucho tiempo, Argentina se había llevado varios palos para ganar títulos, cayendo en finales de la Copa América y en el famoso Mundial de Brasil contra Alemania en 2014. Sin embargo, la nueva generación de jugadores que lleva creciendo desde hace años ha hecho que Leo Messi levanté dos títulos: su primera Copa América y la Finalísima contra Italia hace apenas unos meses. Sin embargo, el hecho de que aún le quede por ganar el Mundial en el que puede ser su último supone una presión para los futbolistas menos experimentados.
Messi jugará su quinto mundial con 35 años, algo que prácticamente supone su último gran reto en su carrera como futbolista profesional. Sin embargo, los números del parisino invitan al optimismo más que nunca. Para ello, el primer obstáculo será quedar primera de grupo en un cuadro asequible (Arabia Saudí, México y Polonia). Además, otro motivo por la que la albiceleste podría tener una gran presión es la gran racha que lleva sin perder. Ya son 36 partidos sin conocer la derrota y la posibilidad de perder un partido en el Mundial podría ser determinante.
Aún así, Argentina es la segunda máxima favorita para hacerse campeona ya que sólo Brasil esta delante de ella en los pronósticos. Por lo tanto, lo que podría ser el último Mundial de Leo Messi es, además de una motivación, una presión añadida en el campeonato mundial.