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El mercado invernal ha dado mucho que hablar, tanto para los equipos que no se han reforzado como para los que sí lo han hecho. Pero de todos los fichajes que han recaído en la liga, ha habido uno que parece haber encajado perfectamente en el equipo. En este caso es el Real Valladolid, que estaba metido en los puestos de descenso hasta que se hizo con los servicios de Cyle Larin, que les cambió la suerte radicalmente.
Hasta que Larin pudo participar con el Valladolid, el equipo de Pucela llevaba cinco derrotas seguidas y se enfrentaba a dos equipos fuertes como el Valencia y la Real Sociedad. El canadiense no entró de inicio en ninguno de los dos partidos, pero contra el Valencia ya hizo su aparición estelar marcando un gol en el minuto 90 para darle los tres puntos al Real Valladolid.
La afición enloqueció con el jugador que les había dado una victoria después de tanto tiempo, pero muchos pensaban que sería cosa de suerte. Sin embargo, llegó el partido aún más complicado en el Reale Arena y Larin volvió a salir al terreno después del descanso. Esta vez fue en el minuto 73 cuando el canadiense puso en jaque a la Real Sociedad con un nuevo gol que, unido al gran trabajo defensivo de los vallisoletanos, quedó en otros tres puntos que les hicieron escapar del descenso.
Ahora, el Valladolid puede respirar un poco ya que se encuentra cuatro puntos por encima del Cádiz, que es el club que marca la zona de descenso. Osasuna será el próximo rival en Pucela, por lo que tienen esperanza de conseguir al menos un empate que les permita seguir en una buena dinámica de sumar puntos. Los equipos de abajo no están del todo acertados y eso precisamente es lo que intentará aprovechar el Valladolid.