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Después del Sevilla, otro duelo con emoción de la Europa League era sin duda el partido entre la Roma y el Bayer Leverkusen. Sobre todo porque Mourinho había entrenado en el Real Madrid a Xabi Alonso y ahora lo tendría como técnico rival. Todos esperaban su saludo y fue emotivo. Aunque pronto se pusieron manos a la obra y el equipo italiano fue a por todas en su campo.
Pese a que esta ida se jugaba en Italia, el Bayer Leverkusen de Xabi Alonso salió con mejor pie que la Roma. Tuvo el dominio del balón y también tuvo varias ocasiones que le pudieron costar caras al conjunto romano. Lo cierto es que no le estaban saliendo las cosas del todo bien a los de Mourinho y la sensación que había en el terreno de juego es que el Leverkusen se podía adelantar en cualquier momento.
Llegó la segunda mitad sin goles y, pese a que el equipo alemán había sentido más cerca el gol, la Roma dio un paso adelante. Bove marcó en el minuto 63 y le dio la ventaja a los hombres de Mourinho. Conseguir un resultado positivo en casa era fundamental, ya que sabían de sobra que la vuelta iba a ser mucho más complicada sin el apoyo de la afición.
Eso obligó a Xabi Alonso a realizar un par de cambios con el objetivo de intentar agitar el encuentro. Aunque el español también sabía que la eliminatoria era muy larga y que un resultado corto como ese podía servir para darle la vuelta en Alemania. El electrónico no volvió a moverse y el 1-0 beneficia a Mourinho de cara a su posible pase a una nueva final. Conseguir ese objetivo sería otro gran hito para el técnico portugués, aunque el Bayer Leverkusen no le pondrá las cosas fáciles.