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El Sevilla contaba con la confianza y la certeza de que podían conseguir la victoria en el Nuevo Mirandilla esta jornada de LaLiga EA Sports. Los precedentes les avalaban y había una necesidad muy grande por salir de ese pozo de malos resultados. El Cádiz, sin embargo, pasaba por una situación muy similar y tampoco iba a regalar el partido. Pero el que regaló los goles al principio del encuentro fue el Sevilla.
Dos errores muy grandes en la salida de balón provocaron que Chris Ramos y Darwin Machís pusieran al Cádiz por delante en el marcador con un resultado de 2-0. Los sevillistas no se lo podían creer, aunque no iban a dar el partido por muerto. Tras un gol anulado a Sergio Ramos, Lucas Ocampos acortó distancias con el 2-1.
El 2-1 estaba matando al Sevilla, pero un gran gol de Rakitic puso por fin el empate en la segunda mitad. Ni Cádiz ni Sevilla fueron capaces de decidir el partido con una victoria, por lo que el reparto de puntos no fue nada satisfactorio para el equipo de Diego Alonso.
Con este empate, el equipo sevillista ya suma seis partidos sin conocer la victoria. Y lo que es peor: en todos esos partidos han encajado goles, símbolo de que hay problemas serios en la parte de atrás. El siguiente reto que tiene el Sevilla es la Copa del Rey ante el Quintanar de la Orden, antes de viajar a Vigo para enfrentarse al Celta. Pese a la mala situación de los vigueses, el Sevilla no es el favorito para ganar el partido (su cuota es de 2.90 euros por euro apostado). Hay mucha tarea pendiente para Diego Alonso y apenas hay tiempo. Los puestos europeos se les están escapando una temporada más, aunque hay tiempo de remediarlo.