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El Real Madrid tenía un reto más que complicado para llegar a una nueva final en medio de su reto en LaLiga EA Sports. Las semifinales contra el Atlético de Madrid tenían un pronóstico complicado y así fue desde el principio: Mario Hermoso marcó a los seis minutos de comenzar el partido. Esto hizo que el Real Madrid tuviera que dar un paso adelante. A la media hora de juego, ya lo había logrado con goles de Rüdiger y Mendy. Pero el partido estaba lejos de llegar a su fin y Griezmann puso el empate antes del descanso.
Rüdiger, esta vez en propia portería, marcó a favor del Atlético de Madrid. La eliminatoria estaba del lado colchonero. Pero Carvajal apareció para poner el 3-3 y mandar la semifinal a la prórroga. Para entonces, Simeone había dado un paso atrás y el Real Madrid estaba dominando ofensivamente el partido.
Ancelotti introdujo varios cambios, pero no fue hasta el minuto 116 cuando Joselu atacó un balón que terminó con gol en propia portería de Savic. El Atlético se fue a por todas y, en el minuto 122, Brahim le ganó una carrera a Oblak (que había subido a rematar al área contraria) para sentenciar la eliminatoria con el 5-3 final.
Un partido con muchos goles y mucha emoción, pero también un esfuerzo extra que no le vendrá nada bien al Real Madrid de cara a la final. El partido necesitó de mucho ritmo y eso se notará en la recuperación de los jugadores. Aunque es cierto que el rival que salga del partido entre el Barcelona y Osasuna tendrá un día menos para recuperarse, por lo que eso también juega en favor del Real Madrid. Están a un paso del título y, tras la heroica semifinal, los de Ancelotti están preparados para la gran final.