No es buen año en el Unicaja, nadie ya lo disimula. Aunque se trata de acabar la temporada lo mejor que se pueda para honrar el escudo y la camiseta. Por ello, se intenta estrechar lazos. Cualquier reunión vale. Por ejemplo, para el próximo jueves hay prevista una comida de convivencia entre los miembros de la primera plantilla y el personal de oficinas que cada día trabaja en Los Guindos. Los miedos de unos son los de los otros. Lo curioso viene cuando se sabe que no hay catering de por medio. Las viandas las llevará cada uno personalmente, jugadores y la gente de la oficina. Como un picnic, pero en Los Guindos. Una manera como otra de hacer convivencia. Cualquier apoyo vale.
