Es Noticia

(68-56) ¡Rebote, rebote, rebote!

Es uno de los primeros gritos que el que empieza en el baloncesto escucha. ¡Rebote! Aíto lo gritó, todos los seguidores del Unicaja que vieron el partido también. ¡Rebote! Una pena, porque por ahí se desangró el Unicaja en la Caja Mágico. El Madrid capturó el doble (54-26) de rechaces. 24 en ataque, números históricos. El equipo malagueño hizo un torniquete en la primera mitad pero murió en la segunda, incapaz de poner remedio. Ninguna de las soluciones de Aíto bastó, ni siquiera un elocuente "Disconection to the bench" (el que desconecte al banquillo) como amenaza a sus jugadores que soltó en un tiempo muerto. Si los rechaces no se controlan, no hay partido. El Unicaja le permitió al Madrid fallar hasta el extremo, pero no pudo hacer más. La sensación no fue tan mala como decía el electrónico del nuevo hogar madridista (68-56). 
El Unicaja salió bien plantado a la Caja Mágica. En el primer tiempo el Madrid sólo tuvo dos ventajas, una de ellas con la que se fue al vestuario (34-32), aunque su rebote hizo trizas los esfuerzos del Unicaja por lograr una renta mayor desde el principio. Sergio Rodríguez, superando a Freire, y Freeland, haciendo lo propio Tomic, comenzaron liderando la anotación respectiva de cada equipo. En términos de igualdad absoluta, la mayor renta fue de cuatro puntos a favor del Unicaja, repetida en varias ocasiones. Berni y Jiménez eran los que mandaba en el partido, aunque McIntyre emitía señales preocupantes. No está bien, es evidente. La sangría reboteadora hacía que Aíto probara soluciones distintas, incluso recurría a Augusto Lima. Pero la hemorragia no se detenía. 16 rebotes de ataque, nada menos, había caputado el Madrid al descanso. Fallaba mucho el equipo de Messina, pero tenía un colchón. 29-17 los rebotes. 16-8 los de ataque. El doble de segundas oportunidades. Un horror. 
El panorama se torció en la segunda mitad. De hecho, se torció, como el tobillo de Jiménez, en la última jugada del primer tiempo. El alero madrileño, fastidiado de la articulación, recayó. Y ahí se escapó un buen trozo del encuentro. Sin Jiménez el Unicaja se descose. Y Sergio Rodríguez siguió con su recital para liderar un parcial de 10-1 que llevó a su equipo a la decena de renta (46-36), la misma que tendría al final del tercer cuarto (53-43). En cuanto los de Messina metieron algo, se marcharon. El rebote fue determinante. El último cuarto fue un ejercicio de impotencia con poco que rescatar, si acaso algún destello de Tripkovic, los minutos de rodaje de Augusto Lima y que los 20 puntos de renta que tuvo el Madrid se maquillaron. 
 
Ficha técnica: 
Real Madrid (17+17+19+15) 68:
Sergio Rodríguez 14, Llull 13, Suárez 1, Felipe Reyes 17 y Tomic 8 -quinteto inicial-. Fisher 0, Mirotic 0, Velickovic 0, Garbajosa 0, Vidal 0, Fischer 5 y Tucker 10. 
 
Unicaja (18+14+11+13) 56: Freire 4, Berni Rodríguez 16, Jiménez 8, Rubio 0 y Freeland 9 -quinteto inicial-. De Cobos 0, Printezis 7, Tripkovic 10, Lima 0, McIntyre 2 y Archibald 0. 
 
Árbitros: Ziemblicki (Polonia), Ankarali (Turquía) y Chambon (Francia). 
 
Incidencias: Segunda jornada de la Euroliga. Caja Mágica. 5.742 espectadores. 
 

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar