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Volvió la ACB, volvió el ogro (77-68)

Redacción local

El Unicaja ganó sin grandes apuros al Herbalife Gran Canaria (77-68). Porque así es el equipo de Joan Plaza, el gran ogro de la ACB, todo lo contrario de lo que le pasa los viernes, donde se convierte en un conjunto más acomplejado, menor. En la Liga Endesa se siente fuerte, por eso lidera la clasificación.

Hubo algunos nombres propios. Toolson y Kuzminskas brillaron en la anotación. El primero estuvo en su línea. El lituano, por su lado, firmó 19 puntos. Con Suárez en el dique seco jugó más de 33 minutos. La relación causa-efecto es más que evidente. La nota negativa fue la lesión de Kostas Vasileiadis.
El primer cuarto fue algo espeso. Salvo la luz que aportó Kuzminskas y alguna acción de Toolson y Granger, el Unicaja no terminaba de sentirse cómodo contra el equipo de Aíto.
Los canarios aprovecharon un pequeño arreón con seis puntos de Salin para irse mandando (17-19). Y arrancaron el siguiente cuarto dispuestos a amargar la tarde a los aficionados cajistas. Pero fue precisamente con 17-22 y cuando menos transmitía el Unicaja cuando despertó con un parcial de 10-0 primero.
Toolson se vino arriba y empezó a anotar de cualquier sitio. Con una primera parte casi perfecta (16 puntos y una serie perfecta de lanzamiento salvo un triple (1/1 de dos, 3/4 de tres y 5/5 en tiros libres). 
Con ese 25-11 tras los segundos diez minutos, la diferencia ya era importante: 42-30. Quedaba por ver si el Unicaja se dejaba de fases oscuras y era capaz de manejar la ventaja.
El tercer cuarto sirvió para mantener distanciado a los pupilos de Aíto. Las canastas se repartían entre otros jugadores que no sólo eran Toolson y Kuzminskas. Con paciencia hasta sirvió para añadir un puntito más a la ventaja (60-47).
Aíto, sin embargo, decía a sus jugadores antes de jugar el último tramo que la distancia no era insalvable. Y lo intentaron, pero cuando parecía que se podía arrimar -se puso a diez puntos- apareció Germán con su infinito talento para quitar suspense al asunto. En los dos últimos minutos, con 72-56, el Unicaja se relajó y el Granca falseó los números. Pero el partido estaba visto para sentencia. El líder sigue intratable en su cancha.

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