Fuenlabrada y la derrota que resume toda una temporada

El Montakit Fuenlabrada, último de la recién concluida Liga Endesa, vivió este domingo en el Pabellón Fernando Martín una dura derrota ante el Valencia Basket (64-87) que resume toda una temporada en la que el conjunto madrileño coqueteó con los puestos de descenso desde la octava jornada hasta la sentencia final que supuso la derrota ante el Iberostar Tenerife hace una semana.Miguel Ángel Moreno
"El partido podría resumir un poco lo que nos hemos encontrado durante la temporada: a ratos querer y no poder, a ratos bajar un poco los brazos. Por momentos hemos estado a merced de lo que quería hacer el Valencia", analizó el técnico fuenlabreño Jesús Sala al concluir el encuentro.
El preparador madrileño del Fuenlabrada reconoció que su equipo no estuvo "al nivel que merecía el partido", en el que, aunque no se jugaban nada en cuanto a la competición, se despedían de la afición después de haberse consumado el encuentro. Comenzaron perdiendo 0-11 y arrastraron una diferencia superior a los 20 puntos en el último periodo.
"No hemos estado al nivel que merecía este partido, sin más. Ha habido jugadores igual que el equipo, que lo intentan y no son capaces; y hay jugadores que no lo intentan. Hay que hacer un análisis profundo de la temporada", comentó el preparador madrileño, que en lo personal se mostró dispuesto a trabajar en la posición en la que el club le ubique en el año que le queda de contrato.
Sala no rehuyó el análisis de una plantilla por la que han pasado 19 jugadores durante el curso, y en la que los niveles de implicación han sido muy dispares. No solo durante la última etapa en la que él ha dirigido el equipo, sino durante toda la temporada.
"Lo que les he recordado antes del partido es que había que tener profesionalidad. Muchos de estos jugadores no van a estar en el equipo al año que viene y yo les he intentado ayudar. En muchos casos va a ser el último recuerdo que se va a tener de ellos en este pabellón. Aunque solo sea por egoísmo y por dar la cara, pero no ha sido así. Sé que ha habido jugadores que han intentado trabajar y coincide que son los jugadores que generalmente lo han intentado", agregó el técnico.
El capitán del conjunto madrileño, el alero Javi Vega, también reconoció tras el encuentro las diferencias de implicación dentro de la plantilla; así como recordó que una de las claves de la mala campaña fue la dificultad para crear un grupo compacto.
"Cada uno se lo toma más o menos personal. En mi caso mi pasado, mi presente y mi futuro dependen de aquí. Para mí esto es trabajo, vida y me afecta muchísimo. A otra gente que está de paso, viene para meses o a hacer sus números; evidentemente le importará menos. Pero es algo que pasa en todos los equipos", comentó el jugador madrileño, que vive su novena temporada en el Fuenlabrada.
Vega cree que el conjunto madrileño tenía plantilla a principio de temporada para estar en una situación distinta al descenso. "El equipo por plantilla era superior, podíamos haber estado más arriba; pero esto son grupos. Bilbao o Joventut al principio no los veías tan arriba, pero encajaron tan bien que al final han sido cuarto y sexto", agregó.
El triste final de la temporada ha sido producto de una trayectoria errática, en la que, pese a tener al jugador más resolutivo del campeonato, el máximo anotador estadounidense Andy Panko; el Fuenlabrada comenzó a pisar los puestos de descenso en la octava jornada y fue incapaz de ganar muchos finales igualados.
"Perder varios partidos al principio de la temporada por poco y empezar con esa racha mala ya nos pasó factura. Desde la jornada ocho ya estábamos jugando finales", reconoció Javi Vega.
Para el técnico Jesús Sala, que cogió al equipo a falta de siete jornadas, la clave fue que la intensidad competitiva que lograron ganando a Gipuzkoa y Laboral Kutxa se les acabó en la visita a La Bruixa D'Or Manresa, que consiguió la salvación el domingo ganando a domicilio al Real Madrid.
"En los primeros tres partidos dimos un cambio de cara, pero es evidente que la intensidad nos duró esos tres partidos. En un año muy negativo, en la primera china que nos encontramos, que fue un pedrusco en Manresa, el castillo de naipes se cayó. En Manresa hubo un equipo que salió a salvarse y a ganar, y otro que no; ante Joventut también fue un mazazo por errores no forzados. Pero es una consecuencia de todo lo hecho durante la temporada", dijo.
Ante esta situación, el Fuenlabrada tendrá que esperar a que los conjuntos que lograron el ascenso por méritos deportivos: Ford Burgos y el ganador de la serie entre Ourense Baloncesto y Ribeira Sacra Breogán Lugo; logren confirmar su entrada en la ACB con los imprescindibles requisitos económicos.
La posibilidad de que el conjunto pueda quedarse en ACB si los dos equipos ascendidos no reúnen los fondos suficientes provoca un debate amplio entre la afición fuenlabreña, en la que se recuerda cómo el descenso del año 2004 dio lugar a una recuperación deportiva que provocó el ascenso y dio paso a los mejores años del club.
"Yo siempre he sido sincero -apuntó Javi Vega al respecto-, lo que me gusta en la competición es jugarte cosas. Si cuando quedas entre los cuatro primeros tienes que ir a la Euroliga, si bajas tienes que bajar y si subes tienes subir".
"Si se da la situación de que no bajemos, es un premio y como jugador prefiero estar en ACB que en LEB. Pero nos hemos merecido el descenso, en caso de ser así hay aceptarlo como es, y el año que viene volver a la ACB", cerró el jugador madrileño que mostró su intención de continuar en el equipo en cualquiera de los casos.
En cualquiera de los casos, para los dos equipos descendidos, Montakit Fuenlabrada y Gipuzkoa Basket, el verano se vivirá con tensión en los despachos a la espera de saber si tienen que diseñar una plantilla para Liga Endesa ACB o para Adecco LEB Oro.