Un Gipuzkoa Basket sin plantilla ante el último paso para su repesca en ACB

El Gipuzkoa Basket afrontará mañana un día clave para conocer si puede ser equipo de la Liga ACB la próxima temporada, ya que vence el plazo para acreditar los requisitos deportivos que impone la patronal del baloncesto español para confirmar la repesca de los guipuzcoanos.Todo indica que el club donostiarra será parte de la élite del basket nacional una temporada más y que hará valer en los despachos la oportunidad que le ha concedido la propia ACB para ocupar el puesto que deportivamente se había ganado el club Tizona de Burgos, que no ha conseguido cumplir con las exigencias económicas para jugar en la máxima división nacional.
El equipo vasco se encuentra sin jugadores, ya que ha liberado los contratos de aquellos que tenían vigencia, pero una vez supere el listón podría volver a recuperar a hombres con los que esté interesado en seguir la próxima temporada.
Además de superar los controles ordinarios de la ACB, la entidad que preside Álvaro Bilbao deberá pasar por una auditoría, procedimiento que ya validó hace dos temporadas con el mismo propósito y también por la imposibilidad del club burgalés de hacer bueno su ascenso directo desde la LEB Oro.
Entre otros compromisos, los donostiarras tienen que acreditar que están al día con la Seguridad Social, con Hacienda y que no adeudan nóminas a los jugadores, además de tener un patrimonio neto positivo.
Este último apartado fue el principal problema precisamente en 2013, pero un convenio en el último momento con el Ayuntamiento hasta 2043 para la explotación de Illunbe, sede de sus partidos, le permitió tener sus cuentas en positivo y ese instrumento probablemente volverá a ser clave esta temporada.