Por la vía rápida resolvió el Barça primera semifinal de la Supercopa Endesa ante un interesante Gran Canaria. Los de Aíto mostraron resistencia 15 minutos, pero a poco que aparecieron las figuras culés no hubo partido. El Barça, primer finalista (60-88).
Ya al descanso dominaba el conjunto catalán por 9 puntos de diferencia (32-41) y se dedicó a lavar y guardar la ropa. Se vieron los primeros detalles de Lawal y Arroyo, aunque fueron Doellman, Abrines y Satoransky quienes pusieron los puntos. Eriksson, joven canterano sueco, se sumó a la fiesta con 16 puntos, máximo anotador, en los últimos 13 minutos.
Verdaderamente la intensidad y la calidad del duelo no acompañaron. El Gran Canaria, subcampeón de la Eurocup, pudo enseñar algunas pinceladas de su interesante proyecto: Pangos, ex compañero de Domas en Gonzaga, Rabaseda, Omic, Aguilar (campeón de Europa con España) o Savané, que regresa tras su paso por el Joventut. Mimbres para Aíto, que volvió a perder en una pista que le resulta familiar.