El Unicaja está obligado a ganar al Manresa este domingo en el Martín Carpena (18:00). Pero no sólo eso, está obligado a ganar convenciendo para recuperar crédito ante una afición que no termina de entender qué le ocurre a este conjunto bipolar capaz de oscurecer Moscú y luego claudicar en cualquier espacio ACB.
Además tendrá que hacerlo con una baja tan importante como la de Stefan Markovic. Eso obliga a Nemanja Nedovic a dar un paso al frente y asumir unos galones que todavía no luce en su uniforme. Se espera mucho de él y ahora es el momento. Porque encima DeMarcus Nelson no podrá debutar en este choque.
El Unicaja cuenta además con la duda de Will Thomas. Pero para dudosos Smith y Jackson, dos jugadores que todavía no han demostrado con regularidad por qué fueron fichados. Es obvio que tienen calidad, pero se espera mucho más de estos dos hombres que no están sabiendo hacer olvidar a Toolson.
Por su parte, los de Ibon Navarro llegan al Martín Carpena en una situación inimaginable para la mayoría a principio de temporada. Lo tienen mejor que los malagueños para alcanzar un puesto copero. Los del Bages son octavos con una balance de 6 victorias y 6 derrotas.
Y poder echar cálculos para la Copa en un equipo cuyo objetivo exclusivo es la permanencia es todo un éxito. Aun así, el entrenador del ICL, Ibon Navarro, no quiere darle importancia a la posibilidad de meterse en la Copa y recuerda que el objetivo es la permanencia y que puede que estas 6 victorias sean la mitad de las 12 que se suelen marcar como salvadoras.
Navarro recuerda también lo circunstancial de la clasificación, siempre en función de cómo caiga el calendario de partidos. Prefiere ir día a día y explica que por ahora lo único importante es ser competitivos en Málaga ya que la experiencia "nos dice que no somos capaces de llegar con opciones a los finales de partido con un equipo de Euroliga. Vamos a ver si podemos hacerlo".