Tienen que rodar cabezas (89-79)

El Unicaja está clínicamente muerto. Tienen que rodar cabezas si no se quiere asistir a un horripilante final de temporada que culmine unos meses tormentosos. El equipo se despeña, acumula derrotas deshonrosas y está en peligro jugar el play off por el título. Sólo se atisban malas noticias, no hay juego, la actitud va con cuentagotas, el esfuerzo se controla y el aficionado se avergüenza constantemente. Tener que celebrar que se salva el average es quizá la mejor paradoja. El Fuenlabrada demostró que merecía estar en la Copa y no el Unicaja, que perdió (89-79) en el Fernando Martín en un marcador muy engañoso. Se perdió desde el primer cuarto por encima de los 10 puntos y se cayó hasta por 27 puntos.

La puesta en escena fue ya horrible. Había recibido el Unicaja 16 puntos en sólo cuatro minutos. Plaza suele disponer el que considera quinteto más sólido de salida, pero eso ya no vale para nada. Da igual, es un flan. No hay solidez, los rivales superan constantemente en el uno contra el uno a los defensores cajistas y cuando enfrente hay un contrario que mueve bien el balón, es el acabose. Popovic y Paunic martilleaban. Pese a los problemas de faltas del croata y Urtasun, el Fuenlabrada marcaba distancias (14-5, 21-13, 29-16) progresivamente. Plaza rotaba, pero nada, no había manera. Hay jugadores fuera, parece que irrecuperables. Los escoltas no tienen confianza, los pivots no producen. Apenas Alberto Díaz tiene algo claridad de ideas y Thomas daba algunos puntos. Triples del pelirrojo y Jackson recortaban, pero el Unicaja era una máquina de perder balones (10 al descanso). Normal que se perdiera por 15 puntos (45-30).
La salida tras el descanso, se supone que tras una bronca mediante del entrenador, fue más lamentable aún. Cuatro minutos después, la diferencia era de 24 puntos (56-32). El Fuenlabrada seguía metiendo canastas sencillas, bajo aro, con un sideral porcentaje del 80% en tiros de dos. Y triples de jugadores henchidos de confianza. Llegó hasta los 27 tantos (61-34) antes de que Díaz ofreciera algo de vergüenza y liderara una reacción que, al menos, demostraba algo de dignidad. Al final del tercer cuarto la diferencia era de 11 puntos (64-53) tras un parcial de 3-19 llevado por Nedovic y Jackson. Parecía que había partido.
Pero el Fuenlabrada rápidamente se encargó de recordar que a día de hoy es mejor equipo que el Unicaja. Se enchufó al partido otra vez, con triples de Wear, Paunic y Popovic (75-57). Y Popovic dio la puntilla con un triple desde casi nueve metros (78-57). El partido ya se convirtió en una pelea por el average, qué triste. Perdió por 22 el Fuenlabrada en Málaga (81-59). Lo consiguió salvar tras perder por 10. Y encima hay que celebrarlo.  Montakit Fuenlabrada (25+20+19+25) 89: Tabu 15, Popovic 14, Paunic 25, Wear 19 y González 2 -quinteto inicial-. Urtasun 2, Cuéllar 0, Úriz 0, Stevic 2, Llorca 2, Smits 6 y Sobin 2.  Unicaja (16+14+23+26) 79: Nelson 2, Jackson 11, Kuzminskas 9, Thomas 11 y Vázquez 4 -quinteto inicial-. Díaz 14, Díez 2, Suárez 7, Nedovic 15 y Cooley 4.  Árbitros: Pérez Pérez, Sánchez Montserrat y Pérez Niz. No hubo.  Incidencias: 20ª jornada de la Liga Endesa. Encuentro disputado en el Pabellón Fernando Martín de Fuenlabrada (Madrid) ante unos 5.000 espectadores.