Carolina del Norte y Villanova lucharan por el título nacional

Los pronósticos se cumplieron a medias en las semifinales de la Final Four del baloncesto universitario de la NCAA después que los Tar Heels de Carolina del Norte vencieron a los Orangemen de Syracuse y los Wildcats de Villanova hicieron lo propio con los Sooners de Oklahoma.Ambos equipos serán los que el lunes luchen por conseguir el título nacional del baloncesto universitario estadounidense.
La doble jornada de semifinales disputadas en el NRG Stadium, de Houston, comenzó con el triunfo aplastante de los Wildcats que impusieron su gran defensa y ataque arrollador para vencer por paliza de 95-51 a los Sooners, que habían llegado al partido como grandes favoritos.
Pero de nuevo los fundamentos del baloncesto se impusieron con un equipo de Villanova que asfixió por completo al jugador clave en el ataque de los Sooners, el escolta Buddy Hield, una máquina de hacer puntos durante todo el torneo, y luego la ofensiva de los Wildcats se mostró imparable.
El triunfo de Villanova no sólo fue amplio, sino que estuvo muy cerca de la humillación histórica al concluir el marcador con una diferencia de 44 puntos.
El escolta junior Josh Hart fue la gran figura en el ataque balanceado de los Wildcats al aportar 23 puntos después de anotar 10 de 12 tiros de campo.
Jamás, en la historia, una semifinal universitaria de la Final Four se había definido por un margen tan abultado.
La anterior marca había sido de 34 puntos que logró Cincinnati frente a Oregon State, en 1962, mientras que Michigan State también venció a Penn State por esa misma diferencia en 1979.
El prestigioso entrenador de los Wildcats, Jay Wright, reconoció que había sido una de esas noches en las que todo te sale bien y al equipo contrario nada.
"Estoy feliz por lo que hemos logrado, llegar a la lucha por el título nacional", destacó Wright. "Pero a la vez me siento mal por Oklahoma porque es un gran equipo, aunque no le salieron bien las cosas".
En los primeros siete minutos del partido, hubo cambios de líder en el marcador casi en cada posesión. Luego, Villanova (34-5) sometió a los Sooners (29-8), que nada pudieron hacer para cambiar la historia de una noche para el olvido.
Los Wildcats se encaminaron a la victoria por medio de una racha de 21-4 de la que los Sooners no sólo no pudieron recuperarse sino que los hundió en todas las facetas del juego y les rompió por completo la concentración.
Varias estadísticas indicaban que el NRG Stadium no era un recinto deportivo --campo propiedad de los Texans de Houston, en equipo que milita en la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL)-- propicio para jugar al baloncesto y anotar puntos.
Pero los Wildcats se encargaron de romper también ese pronóstico y de dejar a los Sooners sin la esperanza de disputar lo que hubiese su primer partido por el título nacional de la NCAA.
Wright reconoció que el equipo de Villanova había trabajado duro en los entrenamientos a la hora de practicar los tiros a canasta en ese tipo de medio ambiente.
"Definitivamente pienso que eso nos ayudó", comentó. "Insistimos en que íbamos a tener un buen desempeño. Se lo dije varias veces a los jugadores y parece que me creyeron".
Villanova se puso con ventaja parcial de 42-28 para concluir la primera mitad, en la que Hart logró un 67 (7-8) por ciento de acierto en los tiros de campo, incluidos seis de 11 triples.
Si los Wildcats habían ganado fácil en el primer partido de la doble-doble jornada, los Tar Heels, que si llegaban de favoritos al partido, los cumplieron con un triunfo cómodo de 83-66, que esta vez no permitió que los Orangemen volviesen hacer historia como décima cabeza de serie que llegó a la Final Four, primera que eso sucedió.
Los Tar Heels, que tuvieron a Marcus Paige como el líder del ataque, al anotar tres triples en la segunda parte, lucharan el lunes por el sexto título de campeones nacionales.
El equipo de Carolina del Norte, que dirige el entrenador Roy Williams, que tiene marca de 33-6, anotó los 11 triples que intentaron hasta la mitad de la segunda parte.
Syracuse bajo la diferencia en el marcador de 17 puntos a tan sólo siete, antes de que Paige resolviera el encuentro al encestar tres triples en siete minutos y acabar con las esperanzas de los Orangemen.
De nuevo el ala-pívot Brice Johnson y el alero Justin Jackson encabezaron el ataque balanceado de los Tar Heels al conseguir 16 puntos cada uno, mientras que el base Marcus Paige llegó a los 13 tantos.
"Marcus encestó grandes disparos", resaltó Johnson, su compañero de habitación. "Si alguien deja desmarcado a Marcus Paige, estoy seguro de que encestará mucho y eso fue lo que sucedió esta noche".
Syracuse (23-14), el primer equipo que llegó al Final Four como décimo preclasificado, tuvo al escolta Trevor Cooney de líder encestador al conseguir 22 puntos, que no impidieron la derrota y dejar a los Orange sin la opción de luchar de nuevo por un título nacional que ganaron en el 2003 con el alero Carmelo Anthony como su gran líder.