El Barcelona Lassa recibe la visita del Real Madrid (12.30 horas), un clásico de la ACB que llega antes de uno de los momentos clave del curso para los azulgrana, que tienen la mente puesta en Krasnodar, donde el próximo martes se jugarán el pase a la Final Four de la Euroliga contra el Lokomotiv Kuban.
Después de dejar escapar la oportunidad de firmar la clasificación a la final a cuatro el pasado jueves en el Palau Balugrana (80-92), los catalanes tienen ahora un calendario apretado con la disputa de tres partidos en apenas seis días: Real Madrid (mañana) Lokomotiv Kuban (martes) y Laboral Kutxa (viernes).
Tres duelos contra rivales exigentes, aunque el encuentro del próximo martes en Krasnodar es el más decisivo de todos. Quizá por ello, el clásico se presenta más descafeinado de lo habitual para los locales, si bien es cierto que un triunfo ante el eterno rival les daría confianza para afrontar con buenas sensaciones el viaje a Rusia, que emprenderán pocas horas después del encuentro liguero.
En éstas, el Barcelona puede tomarse el clásico con calma. Después de encadenar 10 victorias consecutivas en la Liga, los azulgrana, que tienen un partido pendiente (Laboral Kutxa), son líderes en solitario de la Liga con un margen de una victoria con respecto al Valencia Basket, segundo, y dos con el Real Madrid, tercer clasificado.
Sin embargo, no pueden dormirse los catalanes, que tienen un último tramo de liga regular exigente, pues se verán las caras con sus tres inmediatos perseguidores.
Por ello, una victoria ante el Real Madrid les permitiría dar a los de Pascual un paso importantísimo hacia su objetivo de conseguir la primera plaza, cuando quedan siete encuentros para la finalización de la liga regular.
El de mañana será el cuarto partido entre ambos equipos en lo que va de curso. Los tres primeros acabaron con el mismo resultado: triunfos azulgrana en la primera vuelta de la Liga (84-91) y en los dos duelos del 'Top-16' de la Euroliga (86-87 y 72-65).
Los precedentes en la liga regular también acompañan a los azulgrana, que suman 9 victorias consecutivas en los últimos nueve clásicos disputados en el Palau Blaugrana.
Para aumentar esta racha, el Barcelona cuenta con un Juan Carlos Navarro pletórico y un buen Álex Abrines en el perímetro, así como un mejorado Ante Tomic en la pintura, si bien en la última derrota ante el Lokomotiv se echó de menos algo más de control en la dirección de juego y acierto en los tiros abiertos.
Pascual sigue teniendo la duda de Joey Dorsey, que continúa trabajando a contrarreloj para superar su lesión en el tobillo que padeció en el primer partido de la serie ante el Lokomotiv Kuban.
Sí que está a disposición del técnico el también pívot Shane Lawal, que ayer recibió el alta médica de la rotura del menisco externo de la rodilla derecha que padeció hace dos meses en un partido de la Euroliga. Su participación en el clásico dependerá, sin embargo, de la decisión de Pascual.