Carles Durán, entrenador del Dominion Bilbao Basket, confía en el que el denominado "efecto Miribilla" vuelva "a pesar" el próximo domingo en la visita del FC Barcelona Lassa y empuje a su equipo hacia una cuarta victoria que les mantendría en lo más alto de la Liga Endesa."Espero que el campo esté lleno y que, como contra el Estudiantes, si nos falta gasolina la gente nos apoye. La victoria sería importante, pero también ilusionante", ha destacado el técnico catalán en la rueda de prensa previa al encuentro.
Durán ha subrayado que para tratar de sorprender a "uno de los dos transatlánticos" de la competición, junto al Real Madrid, van a intentar mantener la línea de juego de "contactos y velocidad, a campo abierto y con la dureza que el arbitraje nos permita" para hacer frente a la envergadura física de su rival.
"Cada partido es un reto para mí. Tanto el Barça como el Madrid son los dos grandes favoritos no solo de la ACB sino también en la Euroliga. Va a venir un equipazo a Bilbao, pero nos anima la ilusión que estamos transmitiendo y, sobre todo, las ganas de jugar con nuestra gente y de crecer un poco más", ha enfatizado.
Ha avanzado Durán su intención de mantener su estilo de rotaciones, que "va a existir siempre", tanto por su manera de afrontar los partidos como por la necesidad de frescura física para encarar partidos que, "como son la mayoría, te hacen jugar a un alto nivel".
En cuanto al estado de su plantilla, el técnico ha desvelado que Borja Mendia, que aún no ha debutado esta temporada, sigue "regular" de sus problemas físicos y que espera que Iván Buva empiece a entrenar con el grupo este viernes tras estar al margen durante toda la semana.
También ha comentado que Jonathan Tabu regresará hoy a Bilbao después de haberse desplazado a Bélgica con su permiso para asistir al nacimiento de su hijo.
Por otro lado, el barcelonés ha admitido que las tres victorias logradas frente al Fuenlabrada, Estudiantes y Zaragoza, que han colocado al Bilbao Basket como colíder junto al Tenerife, les han ayudado a "coger confianza" a pesar de que "todavía" no son un bloque "sólido" y tienen "muchísimo que mejorar".
"Cada día que estamos juntos vamos creciendo y desde el primer día estamos haciendo bien el creer en lo que estamos haciendo. La clave será que cuando vengan las derrotas no nos afecte esa creencia. Queremos ser el mejor equipo posible en el momento en que estamos", ha subrayado.